Los Hermanos Barnes-Winterspider

Dulces y azucarados 17♥

Nosotros no somos los perezosos. El mundo es muy rápido.

Eso pensaba Peter ó ha pensado toda su vida. Por lo general el no se caracterizaba por ser holgazán u promover la pereza, al contrario, era un chico lleno de energía que a cada segundo hacia algo bueno y productivo; pero en un día como hoy...no podíamos culparlo.

Era su cumpleaños, unos dulces y azucarados diecisiete. Era su día especial así que podía hacer lo que se le antojara. Por ejemplo: cuando cumplió doce obtuvo como regalo un laboratorio casero de alta tecnología que aún conserva; otro cuando cumplió los quince, se tiño el pelo de rosa (el cual le quedaba muy bien) e incluso convenció a James logrando que este se tiñera el pelo a azabache a rubio intenso (pero solo duro un par de meses). ¿Hoy tenia planes? Como tal no, quizá una reunión con la familia, amigos y con obviedad su novio. Pero por ahora, 6:57 am, solo quería seguir haciendo una cosa.

Mimir en el mundo de los sueños...

-¡FELIZ CUMPLEAÑOS PETER!

O tal vez no.

Casi sufre un infarto a tan corta edad culpa de su nada normal familia abriendo brutalmente la puerta, sus padres con un pastel en manos decorada con figuras de fondant de Star Wars, y que decir de los gemelos exhalando alegría.

-Mi pequeño bebito es ya todo un hombrecillo.-dice Tony abrazandolo como a un osito de peluche, dejando besos en su revoltosa cabellera castaña.- estoy teniendo una maldita crisis existencial, hasta ayer limpiaba tu trasero lleno de excremento.

-¡Papá!

-Es la verdad amor.-comenta Steve acomodando sus hebras alocadas.- nos prometiste nunca crecer y jamás dejarnos, ahora la edad adulta es casi tuya.

-Recuerdo que cuando era niño deseaba ser Peter Pan, de esa manera me quedaría con ustedes toda la vida siendo su niño especial.- menciona nostálgico cerrando sus ojos, esa calidez de los brazos de sus padres era tan mágico que transportaba a su bella infancia días de lluvia helada todos abrazados frente a la chimenea... era el mismo calor.

Steve asiento en el hilo fino de la tristeza, pues debería estar regocijado de entusiasmo por el cumpleaños de su pequeño bebe, pese a eso en el fondo le dolía un poco ver crecer tan rápido a sus chicos, saber que un día no necesitarán de él porque tendrán sus vidas hechas. Es ahí donde siempre aparece su amado esposo tomando su mano, transmitiendo toda su buena vibra, haciendo que se calmará por completo.- mi amor, siempre has sido nuestro niño especial.

Unos suaves llamados apenas con sonidos de gargantas hizo qur rodará sus ojos.-ustedes también serán siempre nuestros niños especiales...

James y Bucky asistieron como ganadores.

Steve beso la frente del pequeño colocándose de pie, señaló el pastel y negó.

-Es demasiado temprano para tanta azúcar, te dejaremos dormir más... por suerte comenzaron las vacaciones y tus padres que tanto te quieren y te adoran dejarán que hagas lo que quieras.

Después de muchos besos, Tony casi llorando, las bendiciones y la publicación del moreno deseando feliz cumpleaños a su bebito por wathssup, ya a las 7:39 am la pareja de esposos se retiraron de la habitación a sus respectivos dormitorios.

James y Bucky se quedaron con Peter, en el instante que la puerta fue cerrada exhalaron el aire contenido. Carraspearon sus gargantas y, bueno, son los gemelos Barnes, lo normal en ellos es que hagan algo así...

-Y que pase el cumpleañero.- como ambos seguían siendo niños en cuerpos de adultos Bucky comenzó a recitar el típico discurso que dicen los padre y viejos en los quince años con James heciendo sonidos semejantes a los del instrumental de tiempo de vals, por que esa no puede faltar.