𝘖𝘯𝘦 𝘴𝘩𝘰𝘵𝘴 || 𝘚𝘒𝘢𝘣𝘦𝘤𝘩𝘦 𝘺 𝘛ú

"Imitadora"

(Si quieren, pueden escuchar primero la canción para que se den una idea de lo que se tratará el one shot 😏).

BRYAN

La habitación se siente muy fría.

Hay una tenue luz en el centro alumbrando las cuatro paredes que me rodean, y ninguna ráfaga de aire entra en ésta.

El ambiente se siente tenso, y eso me pone muy frustrado. Todo lo que está pasando me pone muy furioso; no quiero perder la poca cordura que me queda pero, esto se está saliendo de control.

Camino de un extremo al otro extremo de la habitación, me siento muy nervioso y enojado. No sé cómo voy a reaccionar cuando la dejen aquí.

Unos pasos afuera hacen que mis sentidos estén alerta y me empiecen a sudar las manos. Empiezo a sudar frío, todo mi cuerpo se pone alerta y a la defensiva; sin embargo, no quiero demostrarle lo mal que me estoy sintiendo, lo mal que me pone.

El pomo de la puerta gira, se escucha el sonido de la puerta y se abre en su totalidad.

Trago saliva al verla frente a mí.

Mis dos guardaespaldas se encuentran a cada lado de ella, cada uno la sostiene de ambos brazos inmovilizandola. No hace ningún gesto, no muestra ninguna emoción en su precioso rostro y eso me pone más alerta.

La escaneo de arriba abajo, y me detengo en su linda carita.

Su carita de inocente.

La conozco tan bien que, bajo su serenidad, me está estudiando para dar el primer golpe. Y eso no se lo permitiré.

Le hago una seña a mis guardaespaldas para que la dejen en la silla que se encuentra en el centro de la habitación. Caminan con ella y la dejan sentada en la silla.

-Se pueden retirar- les ordeno - cualquier cosa los llamo y vigilen la entrada, que nadie se acerque - les doy una fría mirada. Asienten, salen de la habitación y cierran la puerta, dejándome a solas con ella.

Al ver que estamos solos, su cuerpo se relaja, cruza sus brazos y cruza una de sus piernas sobre la otra; dándome una mirada que conozco tan bien.

Burla y diversión.

Me harté, necesito respuestas y hoy las obtendré.

-Sabes por qué estas aquí, ¿verdad? -le pregunto.

Silencio.

No dice ni una sola palabra, solo me mira, me observa y sabe que está jugando conmigo. Pero, no le daré el gusto, hoy no.

-¡Te estoy preguntando, carajo! -le grito furioso.

-se ríe- Claro que sé porque estoy aquí, cielito -responde burlona - pero no me apetece hablar contigo.

Se encoge de hombros y empieza a observar la habitacion.

¡Mierda! Si sigue con su jueguito, no me detendré y explotaré, no quiero darle ese privilegio.

Me acerco despacio a ella, al estar frente a ella noto que mi cercanía no le afecta, no se pone nerviosa ni se derrite al tenerme en frente; esto está yendo por mal camino.

Una de mis manos acaricia su mejilla, está tibia, cómo lo recuerdo. Dejo unas leves caricias y con mi dedo índice, empiezo a recorrer su cara. Mi dedo recorre su mandíbula, sube a sus labios, acaricia su bonita nariz de botón, acaricia su otra mejilla y dejó mi dedo ahí, sintiendo su suave piel y dando leves caricias.