𝐑𝐞𝐢𝐫 𝐲 𝐅𝐮𝐦𝐚𝐫 | 𝐂.𝐑.𝐎

𝐅𝐢𝐧𝐚𝐥.

𝐁𝐞𝐫𝐞𝐧𝐢𝐭𝐬𝐞~

El volver a estar con Tomas había causado demasiado revuelo, al punto de que en todos lados donde te metías estaban nuestros rostros y/o nombres.

La cara de todos fue una joya que va a quedar grabada en mi mente por siempre.

Igual siempre hay unos cuantos idiotas que se dedicaban a bardearnos.

Claro está que al anunciar nuestro compromiso hubieron muchas revistas con el "casafortunas" con el nombre de Tomas o con mi nombre acompañado de estos artículos.

Muchos decían que era marketing, cosa que ustedes y yo sabemos que es mentira.

La historia entre Tomas y yo estaba terminando siendo como la gran parte de historias de amor.

Casados.

—Ya deja de pensar tanto—Tomas me sacó de los pensamientos.

Se distrajo acariciando mi barriga de 7 meses de embarazo.

—Ihhh—se escuchó desde el piso de abajo.

—Lucas, Tomas—grite haciendo que mis otros dos hijos de 6 y 3 años respectivamente aparecieran por la puerta de la pieza.

—¿Si?—los dos sonrieron angelicalmente, algo habían hecho, lo sabía.

—¿Qué hicieron?—pregunté entrecerrando los ojos.

—Fue Lucas—Se escuchó de Tomas, el más pequeño.

—Fue Tomas—se escuchó de Lucas, el más grande.

—¿Se puede saber que hicieron?—pregunté.

—Nada—dijeron los dos.

—Si no me dicen van a ver—dije.

—Es que votamos el jugo y ensuciamos el piso—explicó Lucas.

—Perdón mami—dijo Tomas llorando.

—Ay, pero eso solo se limpia, pero tengan más cuidado—dije viendo como Tomas se acercaba a su papá para que lo acurrucara.

Lucas le miró y abrí mis brazos por lo que vino a acostarse encima de mi barriga.

—Tengo hambre—dije.

—¿Qué queres?—me preguntó Tomas, ahora mi esposo.

—Las niñas piden helado—dije y automáticamente mis hijos sonrieron y Tomas embozó una pequeña sonrisa.

—¡Helado!—gritaron los tres hombres de la casa con entusiasmo.

Reí.

Tomas tomó a Lucas y lo puso en su nuca, Tomas chiquito puso cara triste al pensar que no lo iba a cargar, Tomas lo miró y lo tomó entre sus manos haciendo que el sonría.

—Tomi—dije como niña chiquita acostada, no me podía levantar, el vino y me ayudó a levantarme.

Pobre hombre.

Caminamos juntos fuera de la casa, cerré los ojos al sentir las olas del mar pegando el la orilla del mar.

—Pa, pa—dijo Lucas emocionado viendo el parque—bájame—le dijo y su papá lo hizo, Tomas chiquito no tardó mucho en pedirle lo mismo y Tomas grande no tardo mucho en seguirlos para jugar junto ellos.

Yo por mi parte me senté en una banca del parque mirándolos con una sonrisa.

En especial a Tomas, mi esposo.

Cuando se ponía a jugar con sus hijos era como un niño chiquito.

Los rasgos de su cara seguían igual, como cuando lo había conocido.

Enzo Tomas, nuestro hijo, era pelo amarillo y piel extremadamente blanca, era idéntico a mi cuando era chiquita, esperamos que el pelo se le quedé así y no le oscurezca como a mi.

Ahora, Lucas Jared, era una copia de Tomas solo que era otro que tenía pelo amarillo.

Sonreí una vez más imaginando cómo serán las próximas mujeres de la familia, Elenor Isabella y Leonor Alejandra, si, gemelas, iba a ser difícil, pero no imposible.

La fábrica de bebés de la familia Campos Gámez se terminaba con esas dos.

O eso esperó, muchos niños correteando por la casa.

Y así es como termina está historia.

Estoy casada y tengo 2 hijos próximamente 4.

Créanme que voy a extrañar contarles como me sentía y que pasaba con la relación de Tomas, pero creo que va a estar así por muchos años más.

Berenitse Alejandra Gámez Rojas se despide, hasta nunca.

$—

Si era para vos.

Fin.

Se terminó gente, amamos.

Escritora:

Little Girl

Idea 100% original, escrita, narrada y desarrollada por ella.

Historia originalmente de Wattpad.

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Fecha de edición: 03/10/2021.