El secreto de Aura

Capítulo 3

Capítulo 3

Sentí como un bulto se ponía a mi lado. Abrí los ojos y ahí estaba Gloria. Es una anciana, su cabello es blanco y está recogido en una trenza, su piel es blanca con muchas arrugas en su rostro y sus ojos son pequeños de color zafiro. Me miró con una sonrisa.

-Lo siento Aura, no quería despertarte- Me decía mientras se recostaba en el colchón de al lado.

-Esta bien- le sonreí -¿Qué hora es?

-Me parece que son las tres de la madrugada.

Aquí la luz siempre es igual. No hay noche ni día. Lo sé porque  de niña leí un libro acerca de los climas de la tierra. Aquí siempre hace frío y está nublado. Son las desventajas de no tener  ni cielo, ni sol, ni Luna.

-¿Qué haces despierta a esta hora?-me apoyé en un brazo mientras miraba a Gloria moviendo un poco a Bronus que se encontraba a mi lado para no aplastarlo.

-Solo pensaba- me dijo.

Gloria fue la primera persona que conocí en Quercus y es la más misteriosa de este lugar. Cuando la expulsaron de Cronors fue por una causa distinta. Su don es ver el pasado, futuro o cosas relacionadas de la vida de las personas. Ella trabajaba diciéndole a la gente lo que querían saber pero a veces no era muy agradable lo que veía y decía así que empezaron a tenerle miedo. Otro motivo para no ser "perfecto". Así fue como todos decidieron que ella debía ser expulsada de la ciudad.

-Será mejor que duermas- Se recostó completamente Gloria en su colchón y cerró los ojos. Yo hice lo mismo.

Cuando fui expulsada de Cronors era una bebé. No recuerdo como era la ciudad, ni tampoco cómo llegué al bosque. Gloria fue quien me encontró. Me contó que ella estaba buscando agua cuando me halló y al instante supo que era una huérfana y que había sido expulsada. Me llevó al refugio y me cuidó como si fuera su hija. Al principio no sabía nada de mí y decidió que no me llamaría de ninguna manera hasta saber mi historia. Intentó varias veces leer de dónde provenía pero siempre veía imágenes borrosas. Fue así hasta que cumplí los cuatro años.

Mis padres me habían llamado Aura, mi padre era de Cronors y mi madre de algun lugar de la tierra que desconozco. Él desde pequeño tuvo mucha curiosidad por saber que había afuera de Cronors porque era un amante de la aventura.
Una de las reglas de este lugar es que nadie puede salir de aquí, además de que quieren que nuestros dones sean secretos, es casi imposible salir de la isla por la razón de que si lo intentas siempre terminarás jalado a ella, es como si nos tuvieran encerrados aquí.

Mi padre decidió buscar alguna forma de salir y después de varias investigaciones de cómo hacerlo lo consiguió. Conoció a mi madre y se enamoraron. Después de un tiempo ella quedó embarazada de mí y decidieron regresar por la misma razón de que mi padre era atraído de nuevo a la isla. Pero al llegar todo era diferente, habían cambiado de gobernador y él empezó a matar y expulsar a muchas personas. Mis padres se mantuvieron en secreto para que nadie preguntara nada pero cuando nací, mi madre murió. Piensan que fue porque yo soy de Cronors y puede ser que sea demasiado poderosa. Mi padre me cuidó las primeras semanas pero por una razón que desconozco me abandonó y después me encontraron los soldados quienes me llevaron al bosque.

-Aura, Aura-escuché que alguien susurraba. Sentí algo frío por toda mi cara y mi cuerpo. Abrí los ojos y me levanté. Estaba empapada. A mi lado se encontraba Nico con una cubeta vacía. Lleva un gran abrigo, un gorro viejo y sus guantes están a punto de romperse. En su hombro llevaba a Leteci. Lo miré sacudiendo un poco mis brazos para quitarme el exceso de agua y me dijo- No despertabas.-

-¿Y esa fue una forma muy buena de despertarme? ¡Con agua helada!

-No lo hubiera hecho si no tuvieras el sueño pesado. En serio creí por un momento que estabas muerta.