𝐷𝑒𝑢𝑥

448 62 2
                                    

Kiss

Los pequeños ojos de Jeno vacilaban en el rostro del menor, quien no paraba de hablar de su terrible día en la secundaria. Una pequeña sonrisa adornó su rostro al ver el puchero que se formó de repente en los labios de Jaemin.

ㅡ ¿me estás escuchando, Jeno?ㅡ preguntó Jaemin al notar la sonrisa tonta en el rostro de su novio y lo que menos hacía era prestarle atención a su reproche de su mal día. Así que infló sus mejillas para demostrar su tierno enfado con el mayor.

ㅡ Claro que te estoy escuchando, Nanaㅡ respondió Jeno moviendo su cabeza para alejar su expresión de colegiala enamorada.

Jaemin siguió su historia y Jeno continuó observando a su novio, analizando todas sus expresiones faciales, sus pequeños únicos gestos, sus ojos brillantes cargados de recuerdos y aquellos labios rosados de los que Jeno fantaseaba sin cesar cada vez que miraba a Jaemin.

Tan suaves, teñidos de un tono de rosa claro como aquel algodón dr azúcar que tanto le gustaba a Jaemin en la feria de la ciudad, tan delicados como pétalos de rosas y tan lindos que le gustaría besar en ese instante.

Y Jaemin, al sentir una curiosa mirada sobres sus labios no pudo reaccionar a tiempo porque sus mejillas ya se habían tornado rojas y su cara comenzaba a arder tal como si estuviese bajo el sol de verano.

ㅡ ¿Jeno?ㅡ llamó el menor buscando la atención del joven que vagaba en su imaginación.

Jeno no respondió, solo se acercaba más a la sonrojada cara del menor, quien sentía que su corazón iba a salir de su pecho al sentir cada vez la presencia de su novio más cerca cada segundo.

Entonces, en un rápido parpadear, Jaemin y sentía la respiración de el mayor tan cerca de sus labios, que no logró reaccionar ante lo que estaba sucediendo cuando sintió que los labios del mayor se juntaban con los suyos.

Un tierno y dulce beso comenzó en sus labios, que estaban juntos y que por inercia, ambos cerraron sus ojos al sentir la calidez del otro. Sus labios creaban un suave y delicado movimiento, suspirando y sonriendo en el climax de tan tierna muestra de amor.

Cuando Jeno al fin reaccionó, regresó a su postura inicial, alejándose torpemente de los labios del menor. Pero en el caso de Jaemin, sus mejillas de nuevo se encontraban tan rojas como las dulces manzanas que tanto amaba Jeno.

ㅡ Otra vez tu carita hermosa está rojita Jae ㅡ comentó Jeno acariciando la tez rojiza de Jaemin.ㅡ ¿estás seguro de que no estás enfermo?

ㅡ Ya te he dicho que estoy bienㅡ respondió oculando su carita en sus manos.

ㅡ ¿Y si tienes fiebre?ㅡ cuestionó el mayor tocando con el dorso de su mano la frente del menor, notando lo caliente que esta se encontraba.ㅡ Tu carita parece que va a estallar ¡está ardiendo!ㅡ exclamó Jeno.

ㅡNo tengo nada, Jenoㅡ respondió por milésima vez en la semana.

Ambos no siguieron para no comenzar una tonta discusión por algo tan irrelevante como lo es, para Jaemin, su rostro sonrojado, pero para Jeno, él quería cuidar de su novio y no descansaría hasta saber que era lo que le sucedía a su novio.

𝖥𝖾𝗏𝖾𝗋 | 𝗡𝗼𝗺𝗶𝗻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora