Nos Persiguen Las Desgracias || Aristemo

Hacer creer al otro que nunca lo amaron

Narra Temo

Era un día tranquilo la verdad es que me gustaría decir que todo iba a bien, pero a decir verdad, no era así, últimamente yo había estado recibiendo unas cuantas amenazas para alejarme de Aristóteles pero a decir verdad solo las había ignorado creyendo que eran una broma de Diego o de Mateo pero la verdad ya no se que pensar

“Aleja de Aristóteles si no quieres sufrir las consecuencias” leí por 5ta vez la nota que había recibido el día anterior, tengo miedo de lo que pueda pasar su no lo hago, pero tampoco quiero alejarme de Aristóteles, el es la persona que más amo y que me ha sabido aceptar tal y como soy, el me ha enseñado muchas cosas, me enseñó el verdadero significado del amor, me enseñó a ser el complemento perfecto que necesitaba en mi vida, me enseñó a ser un buen segundo padre para Arqui, nunca me dejó solo y yo tampoco quiero dejarlo solo a él, no que pueda pasar pero ahora solo agradezco que aún no vivamos juntos porque no sabría cómo mentirle al ver mi comportamiento que ha cambiado desde que esas notas comentaron a llegar más frecuentemente, hoy voy a ver a Ari y simplemente no puedo imaginar mi vida sin el

Termine de arreglarme y esperar a que mi novio pasará por mi así que me puse a escuchar música y a recoger un poco mi cuarto ya que tenía varias cosas desordenadas. Escuché un claxon seguido del ruido de mi celular anunciando un nuevo mensaje. Era Ari, me estaba esperando afuera así que tome lo necesario y me dirigí a la salida, cuando salí lo vi parado fuera de su auto, llevaba unos jeans azules rotos de las rodillas y una playera polo color negra, con unos tenis vans del mismo color, sin duda mi chico hoy lucía más atractivo que nunca

—Hola amor— Dije cuando estaba cerca de el

—Hola— Me dio un beso— Amor hoy te ves más precioso que nunca— Dijo mientras me giraba en una vuelta para ver mi atuendo completo, yo lleva un crop rojo con negro que Ari me había regalado años atrás en mi cumpleaños y llevaba unos jeans negros con unos tenis Adidas negros

—Gracias Tahi, aunque usted también se ve muy guapo el día de hoy señor Aristóteles— Dije regalándole una sonrisa

—Debo lucir bien para salir con usted señor Cuahutémoc— Respondió mi novio respondiendo mi sonrisa

—Jajaja, ya vámonos—

Nos subimos al auto y la verdad es que fue un día maravilloso, cuando nuestra cita termino Ari me regreso a mi casa pero yo tenía un mal presentimiento, no quería que se fuera, pero tenía que ir por Arqui a casa de Lota así que lo deje ir

—No vemos el jueves amor— Dijo Ari

—Aun faltan muchos días— Dije haciendo un puchero

—Amor estamos a lunes, verás que los días pasarán muy rápido— Respondió mi novio depositando un beso en mi sien— Ahora debo irme, Arqui estará esperándome—

—Bien, conduce con cuidado y avísame cuando estén en tu casa— Pedí

—Claro que si amor, como ordene mi Tahi— Hizo ademán de obedecer y después me dio un beso

Se dirigió a su auto para después subirse e irse, después de un par de segundos se perdió de mi vista así que entre a casa, en verdad que tenía un muy mal presentimiento, pero no debía ser algo malo, cuando entré pude ver qué la correspondencia ya había llegado así que tome las cartas y fui viendo una a una hasta que llegue a la que menos me gustó

“¿No lo entiendes?”

Decía aquel sobre, tenía miedo de abrirlo, tenía miedo de que le pasará algo a Ari, tenía miedo de no poder ayudarlo y tenía miedo de que me alejaran de el, así que lentamente decidí abrir el sobre