Poco

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Poco y Piper salieron a caminar por la noche cuando todos estaban en sus casas durmiendo. Ella estaba apoyada sobre su cabeza, tomando su brazo mientras avanzaban juntos. Las velas, los adornos, el cielo, todo creaba el ambiente perfecto para ellos. Sentían que estaban en el lugar y momento indicado. Como si fuera obra del destino. 

Piper: ¿te diste cuenta?

Poco: ¿de qué?

Piper: las estrellas... siguen ahí. Aun podemos verlas. Son estrellas muertas. Estrellas que se apagaron. 

Poco: sabes... a veces me pregunto si el Mundo de los Muertos es realmente algo que va mas allá de la muerte. Aun puedo sentir las estrellas, la noche. Aunque es posible que mi vida como muerto en el mundo normal me haya dado esa capacidad. A ti también te pasa, ¿cierto?

Piper: claro que si. 

Poco: solo hay una cosa por hacer cuando surgen dudas como estas. 

El mariachi tomó su guitarra, la cual estaba colgada en su espalda. Cerró sus ojos y lentamente dirigió su dedo hacia una cuerda, tocándola y generando un suave sonido, hasta que... "CRASH"; En el momento en el que tocó la cuerda se oyó un estruendo acompañado de un temblor. 

Piper: ¿qué es eso? 

Poco: yo... no lo se. Solo... solo quería hacer música.  

De pronto, una voz grave habló, dejando paralizado a Poco.

???: exacto, Poco. No lo sabes. Y esa es la razón por la que debo acabar con todo... y con nada.

Poco: ¡¿qué?! ¡¿quién está hablando?!

Piper: ¿con quién hablas, Poco?

Poco: no tengo idea. Es como una voz que proviene de todos lados, pero al mismo tiempo no está en ningún lugar.

De repente, se abrió una grieta separada de las dimensiones del cielo y la tierra. Dentro de ésta se veía algo indescriptible. No era oscuridad, no era vacío, tampoco era la nada misma. Ni siquiera era otra dimensión. Simplemente era la forma de la desaparición de la realidad, si es que se puede definir como "forma". Esta brecha se extendió rápidamente por todo el espacio. El mundo lentamente estaba desarmándose en pequeños pedazos, los cuales flotaban hasta desvanecerse. De pronto, la guitarra comenzó a levitar, formando un aura morada alrededor de ésta. La gente al escuchar el alboroto se despertó y, aterrorizada, empezó a huir a donde pueda, mientras veía como sus hogares eran destruidos.

Piper: ¡Poco, corre!

El mariachi observó a Piper y luego a su guitarra.

Poco: ¡no! ¡Quizas yo sea el único que pueda detener lo que sea que esté pasando! ¡Tu y los demás váyanse de aquí! 

El esqueleto corrió hacia su instrumento. Con temor, dirigió sus manos hacia éste. Al hacer contacto con él, comenzó a gemir y casi a gritar del dolor que le estaba provocando. El aura morada se extendió hacia el. No podía despegar sus manos de la guitarra y el mundo aun seguía despareciendo. Las casas fueron destruidas y muchas personas comenzaban a desvanecerse. Poco trataba de hacer lo posible para pararla.

Piper pensó: "no se que sucede, pero debo ayudarlo. Si combinamos nuestras fuerzas podremos resolverlo. Debo confiar en nuestro poder; el poder del amor".

De pronto, Poco vio como, a su lado, Piper hizo contacto con al guitarra junto a él. 

Poco: ¡¿qué estas haciendo?! ¡No podrás aguantarlo!

Piper: yo no podría, pero juntos podemos. Nuestra conexión es mas de lo que se podría entender. Es tiempo, espacio, destino. 

Poco: e... está bien. Hagamos esto. 

Poco X Piper - Notas lluviosasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora