Tu eres mi presente y Futuro pequeña.

6: SAMUEL

Despierto, pero aún no quiero abrir los ojos, sigo en los brazos de Matt, por su respiración deduzco que sigue dormido. Intento no hacer movimientos muy bruscos para no despertarlo.

Me pongo a pensar en cómo sería si me levantara con el todos los días y me reprendo a mí misma, no puedo enamorarme.

Recuerdo de cómo me tomo en la reunión de mi padre, en cómo me trato ayer de delicado y en la conversación de ayer, será complicado no enamorarme, estoy en serios problemas.

-Buenos días pequeña.

Abro los ojos y lo veo sonriendo, no sé cómo le hace, pero despierta igual de atractivo a como se acostó, yo debo parecer un espanta pájaros.

-Buenos días Grandulón

Matt se mueve un poco y se lanza a mis labios besándome, intensa pero lentamente, que rica manera de despertar.

-Dormir contigo ha sido delicioso, ahora será mi acción favorita.

No puedo creer que él sea así de cariñoso conmigo, seguro solo lo está haciendo para conquistarme.

-No te acostumbres mucho.

-Y eso porque pequeña.

Como le digo que no quiero enamorarme y que siento que si el sigue por ese camino en menos de una semana me tendrá a sus pies.

-Porque no sabemos si seguiremos juntos.

-Yo si lo sé.

- ¿Ah sí?

Matt me agarra con los dos brazos y me sube un poco para que quedemos cara a cara.

-No veo porque no seguiríamos juntos, los dos nos gustamos, al menos dame la oportunidad de soñar.

¿Soñar él? La que estoy soñando soy yo, si va a seguir así no me quiero levantar de esta cama jamás.

-Solo siento que vas muy rápido.

-Si quieres que vayamos lento eso haremos, por ahora nos levantaremos a desayunar.

Cuando sea la hora del almuerzo sé que será una pelea, aun no le he dicho que saldré con Samuel, aunque el me lo haya prohibido.

- ¿En qué piensas?

-Nada en especial grandulón, pero podemos hacer un poco de pereza.

-Necesito alimentarte, estas más delgada que mi hermana y Hanna es bastante delgada.

-Ya te dije que no es porque yo no coma.

-Pues no me lo estas demostrando.

-Solo hagamos pereza un rato y bajamos a desayunar.

-Está bien

Me volteo para cambiar de posición, me levante tal cual me dormí, no creo que me haya movido, necesito que mi cuerpo pruebe otra posición.

Siento que Matt se voltea también y me abraza quedando en cucharita los dos.

Matt comienza a besarme el cuello y siento su miembro levantarse cada vez más, se a dónde va todo esto y no voy a ser yo la que lo frene. El sigue besando mi cuello mientras sube mi bata dándole paso a sus dedos para entrar a mi sexo, acto que hace que me arquee.

-Eso Sofi disfrútalo, siéntelo.

No sabe lo bien que disfruto y lo siento, mete otro dedo y yo gimo, que delicia, enserio son dedos profesionales.

-Estas húmeda, no sabes cómo me excita eso Sofia.

Saca los dados de mi sexo y en un movimiento ágil se pone encima mío.