Mi Secuestrador

Capitulo 11.

Paso un rato y veía a Thomas muy nervioso.

- Tranquilo- dije mientras tocaba su hombro.

- No puedo estar tranquilo-. Dijo Thomas

- lo se estas personas son muy malas

- Es mi culpa-. me interrumpió- Debí haberla cuidado mas, y nada de esto hubiera pasado.

- Mira, ahora no es momento para lamentar nada, solo podemos esperar a que ella se encuentre bien.

Pasaron muchas horas, estaba adolorida y asustada por que Camila no salia de la habitación. Tenia que ir a buscarla, así que trate de buscar algún objeto que podría ayudar a deshacerme de las esposas de Thomas. Por suerte, yo tenia algo mas fácil de deshacer: una cuerda enrollada entre mis muñecas. Con todo el dolor del mundo intente deshacer el nudo con mi boca, pero me ardía muchísimo. Intente mover las manos de arriba hacia abajo para aflojar la cuerda y después de un rato funcionó. 

No deje que Thomas me acompañara, solo le pedí que vigilara desde su posición.

Camine un poco a la puerta y reuní fuerzas para patearla lo mas fuerte posible hasta que se abriera. Pero al abrirla vi algo aterrador.

Camila estaba en el suelo, muy golpeada con una cinta en su boca que no le permitía gritar y al lado suyo... Tony. El estaba sentado al lado de Camila, con sangre en su mano y una herida muy profunda en el brazo. Dante se acerco a mi y yo vi rápidamente un cuchillo que estaba en el suelo y se lo tiré sin ver. Este se calvo en su mejilla haciendo que el gritara fuertemente ante el dolor. Me acerque a Camila y quite la cinta de su boca.

-Skylar! Gracias-. dijo entre lagrimas.

- No hay de que- respondí 

Voltee a ver a Tony, me pondría mal verlo de esa forma, y comprendí que ya lo que ocurrio entre nosotros dos... se había perdonado. 

Ayude a Tony a levantarse, y los tres tratamos de salir; Pero en la puerta apareció Alex diciendo:

- Que es todo ese ruid...- Y nos vió

- Déjalos a ellos libres, haz lo que quieras conmigo, ellos no merecen esto. Triplicaras el dinero si quieres- le rogué

Alex no dijo ni una sola palabra así que salimos corriendo lo mas rápido posible. Pero Alex corrió de tras de nosotros. Los tres entramos a la primer habitación que vimos para escondernos.  La habitación estaba cubierta de sangre por las paredes, tenia aspecto de un consultorio dentista pero viejo y con un horrible olor. Les ordené a Tony y Camila que se quedaran en aquella habitación mientras iba a buscar a Thomas. Al correr lo mas rápido posible tropecé y me encontré cara a cara con Alex que tenia en su mano una jeringa al parecer contenía anestesia.

No podía correr, no podía gritar... era el fin. 

De pronto escuché un disparo muy cerca de mi, y vi suavemente como caía el cuerpo de Alex en el piso y al mismo tiempo la silueta de Ethan iba apareciendo.