Mi Secuestrador

Capitulo 8

Me senté en el amplio sillón de la sala y Ethan trajo una venda, algodones y alcohol para curarme; estire el brazo y Ethan se arrodilló, coloque la palma de la mano hacia arriba y pude ver lo infectado que estaba . El tomó suavemente mi cara y no me permitió mirar mi herida.

-Mantén tus ojos en mi- dijo.

Sus ojos eran tan profundos, que quise detallarlos de masa cerca. El también se acerco, tanto que ya sentía su respiración. Y fue cuando ocurrió sus labios ya estaban roscando los míos en un tierno y dulce beso. Pero como era posible que esto pasará?. Se supone que estaba todavía en sospechas, no tenías que besarlo!, me dije a mi misma.

-Estudiaste medicina?- cambie el tema.

El se sintió un poco incómodo, entonces siguió colocando alcohol en un poco de algodón.

-Empece a estudiar medicina en la universidad, pero después mi madre murió y me dedique a otras cosas- el algodón se sentía muy frío, y en un par de segundos empezó a arder.

-Lo siento, no quería que mencionaras eso- le dije apartando la mirada para no llorar.

-No pasa nada linda, ya lo supere ahora me encargare de ti- y me vendo el brazo.

Cuando término le id las gracias y me subí a mi cuarto el me acompaño y antes de que se fuera a su habitación me dijo:

-Fue lindo el beso, yo no olvide- y guiñó el ojo.

Yo me sonroje mucho, pero decidí sólo responderle con una sonrisa.

Eran las 4:00 p.m y estaba muy aburrida siempre me la sacaba viendo televisión, o incluso pensando en el beso.

-Quédate aquí por 5 minutos, no me tardo- me dijo recostandose por el marco de la puerta.

-¿Qué haces?- le dije, ya que sospechaba un poco de el.

-Confía en mi- camino hacia mi, cogió mi mano y la beso.

-Confió en ti-. Exactamente no confiaba plenamente en el pero empezaba a sentir mariposas cada vez que me hablaba, o me mira directamente a los ojos.

Ethan se fue de mi habitación, y no sabía porque razón, o que quería hacer, pasaron 10 minutos y Ethan volvió a al marco de la puerta con una bolsa del almacén "ZARA" en su mano derecha. Me levanté de la cama, y me puse unos vans que combinaban con mi vestido. Pensé que que ya era la hora de salir de la habitación, así que me dirige a la puerta.

El estiro su brazo mostrándome la bolsa.

-Para ti- dijo con una sonrisa.

-Otro vestido?- le dije.

-Este que te traje es para una cita de noche- dijo.

-Pero si no me dejas salir como voy a tener una cita- le dije.

-Tendrás una cita conmigo, en esta mansión, así que cámbiate y bajas a la cocina- me ordeno.

Alce una ceja, pero le hice caso. El se fue y cerré mi cuarto. Después de tomar una ducha, me depile las piernas, cepille mis dientes y me coloque el vestido que me había dado. Era un vestido rojo, algo corto y me imagino porque... Me puse accesorios, un reloj dorado grande, un collar del mismo color y unos tacones altos que combinaban con todo.

Baje a la cocina y en las escaleras habían pétalos de rosas blancas alrededor. Mínimo las había colocado para que no me perdiera. Al final de las rosas, había una amplia piscina con pétalos flotantes y luces que la iluminaban. Era hermoso. Al final de la piscina estaba Ethan con un ramo de rosas blancas y un traje algo elegante.

-Que hermoso está todo. Muchas gracias- y lo abrace.

El con una sonrisa corrió mi asiento y me invito a sentarme.

-¿Porqué hiciste todo esto?- le pregunte.

-Quería hacer algo especial por ti- dijo.

-Esta todo muy bonito, gracias por el vestido, como sabías mi talla?.

-Conozco todo de ti- dijo, produciendome un escalofrío.

-Eso suena algo extraño... Pero me gusta- dije mientras habría una pequeña charola con comida.

-Esto lo cocinaste tu?- le pregunte.

-Si- respondió.

-Que otras cosas sabes hacer?- le pregunte algo interesada en el tema.

-Soy muy bueno en escoger a la persona con la que quiero estar- dijo- y te escojo a ti.

-No entiendo porque lo dices, no nos conocemos mucho- dije mientras comía.

-Ven, te mostrare porque.- dijo levantándose para que lo acompañara.

Ethan me llevo a su habitación, era muy grande y muy bien decorada. Oprimió un botón al lado de su escritorio y dígito tres números lo cuales eran 19/6; el día de mi cumpleaños.

Y me invito a entrar. Bajamos unas escaleras de madera, y al final había un cuarto el cual no tenía cerradura. Apenas abrió la habitación no podría creerlo las paredes estaban llenas de fotos, fotos mías. Sentía mucho miedo en ese momento, el tenía una obsesión muy grande por mi.

-Wow- se me escapo la palabra.

-Lo se todo de ti Skylar- me dijo mientras pegaba una foto mía de hoy en la mañana.

-Y porque lo sabes?- pregunte.

-Me mandaron a investigarte para el secuestro e hice muy bien mi trabajo.

-Y porque tienes fotos mías en tu pared?- le dije.

-Porque me obsesione contigo- me dijo acercándose a mi.

Era el momento de otro beso pero fue interrumpido por su celular.

-Perdóname- dijo mientras contestaba.

-Tranquilo- le dije apartandome.

-Si, ya voy para allá- y colgó.

-¿Quien era?- se me escapo la pregunta.

-Una amiga- dijo.

Pero no podía evitar tener celos.

-Una amiga?- seguían escapandose, mis preguntas.

-Es broma, viene mi hermano- dijo sonriendo.

-Sabes? Quisiera conocer más de ti, deberíamos tener otra cita- dije mientras salía de su habitación y subía las escaleras.

-Ya vengó, iré a indicarle la entrada de la casa ya que esta algo camuflada- me dijo mientras cogía sus llaves de la camioneta.

-Esta bien- dije.