Crush (JungKook) | Terminada

5

Una vez más se encontraba en el departamento de Taehyung con la diferencia de no tener a un Jimin borracho en los alrededores y Yoongi mirando con recelo a DongYul, aunque no le tomaba mucha importancia a sus miradas cargadas de rencor. Entendía bien lo que sentía Yoongi pero también comprendía que DongYul no tuviese la culpa, tan sólo estaban pasando el rato haciendo apuestas con alcohol de por medio.

Después de la primera visita al departamento de su amigo, DongYul y él siguieron escribiéndose, también llegó a "invitarlo" de alguna manera al departamento que compartía con Yoongi y Jimin cuando éstos no estaban. Al principio los nervios le consumían desde sus adentros por invitarlo a un espacio más personal y sintió un leve cosquilleo cuando DongYul le escribió que sabía dónde vivía, quizás había traído a Jimin aquí más de una vez y Jungkook como no solía estar pendiente a la ventana y a todo lo que hagan sus amigos, se sumergía en los libros de textos que tenía que estudiar hasta que la visita de DongYul -por primera vez con él al menos- compartía un poco de su tiempo de estudio para seguir hablando con él.

Se enteró que le gustaban los perros, su comida favorita era la pasta, la mayor pasión que tiene en su vida son las motoras y aquellos tatuajes que cubrían sus brazos contenían significados personales que no quiere revelar y por eso Jungkook podía comprenderlo. También se asombraba de lo mucho que sabía DongYul sobre la psicología, algo que Jungkook desconoce casi por completo pues no era su carrera de estudio, podía mantenerse sin escribir durante el chat para ver los largos mensajes de DongYul explicándole cada detalle y eso le parecía algo dulce de su parte.

Sin embargo, lo más importante de todo es que mientras hablaba con él a través de Twitter se sentía lo suficientemente cómodo para discutir de cualquier cosa, algo que no le sucedía después de tanto tiempo. Desde cosas banales como gustos personales e incluso chistes sin sentido hasta reflexionar juntos sobre problemas de la vida cotidiana del ser humano. Jungkook estaba estudiando en la facultad de humanidades y aunque DongYul siempre tenía presente en sus conversaciones que era un simple ignorante en el tema, podía hablar de cualquier cosa relacionado y sabía que DongYul le prestaba atención, preguntaba cosas que de verdad no comprendía del todo y no con vagas preguntas para mantener una conversación. Aquellas conversaciones pasaban de un tema tras otro y no se quejaba en absoluto.

Aunque todo eso cambiaba un poco en persona, puesto que la timidez de Jungkook por hablar lo mortificaba por dentro, como ahora que de entre todos el más aburrido del videojuego era Yoongi ya que siempre lo consideraba muy infantil, todos sabían y había aprendido DongYul a las malas que el mayor del grupo en realidad era muy competitivo y detestaba perder. Su nuevo compañero estaba a su lado pendiente a la pantalla, tratando de alcanzar al primer lugar que por supuesto era JungKook por lo bueno que era jugando en ese específicovideojuego. Taehyung y Jimin iban detrás de DongYul.

Las cosas no estaban saliendo tan bien como esperaba, Yoongi se estaba aburriendo y él pronto lo haría si nadie le ganara en esta partida. Después no tendrían más qué hacer así que irían por unas cervezas. JungKook tuvo una idea con tal de evitar a casi todos en estado de embriaguez.

-Podemos jugar al escondite -le puso pausa al juego y Taehyung se quejó, los demás tenían sus ojos puestos en él -¿Si sabes que esto es un departamento muy pequeño para esconderte? Aparte no somos niños -dijo Yoongi en un tono más o menos burlón, DongYul no dejó de intimidarlo con sus ojos mientras tanto.

-Kookie es cierto lo que dice Yoongi hyung. El departamento es muy pequeño para jugar algo así y signifique no hay buenos escondites. -le reprochó Taehyung pero ya sabía cómo responder a esa clase de excusa.

-Entonces que la persona que tenga que busque se ponga una venda sobre sus ojos y para capturarnos tendrá que tocarnos y si no tienes vendas le ponemos una de tus camisas.