6. BUENAS INTENCIONES

13 2 0
                                    

Capítulo 6: Andrea

Ya estoy en la floristería, Alexa en la panadería y Antoni en la cafetería.

Creo que Alexa no vendrá con nosotros a la casa de Antoni a conocer a su madre, por alguna razón extraña estoy nerviosa, empiezo a jugar con mis dedos, mi cabello, pero en cuanto empiezan a entrar clientes a la floristería me distraigo de mis pensamientos.

De pronto, entra Thomas a la floristería, lo cual se me hace un poco extraño.

– ¿Thomas?¿Qué haces aquí? –pregunto extrañada.

– ¿Andrea? ¿Que haces tú aquí? – dice con tono extrañado.

– Ah ahora trabajo aquí, ¿Y tú, que haces por aquí?

– De hecho, vine a comprar unas flores para una chica con la que estoy saliendo –dice con un brillo en sus ojos.

– Que bueno, me alegro por tí –había estado hablando con Thomas sobre su estado emocional y ya se encontraba mucho mejor.

– Si, y ¿qué hay de nuevo en tu vida?¿Ya apeteció algún afortunado para ese corazón de piedra? –me pregunta divertido, lo cual me hace gracia y le respondo.

– Primero que todo no tengo un corazón de piedra, segundo, no hay nada de nuevo, he gestado trabajando por aquí.

Salimos a la cafetería donde trabaja Antoni, mi jefe me dió un espacio libre porque la floristería no estaba muy transcurrida; Thomas me contó cómo había conocido a la chica a la que le iba regalar las flores, dijo que era de ojos negros, cabellera castaña oscura. Yo le conté sobre Antoni, como lo había conocido y que ahora está trabajando para recoger dinero y ayudarle. Me dijo que eso era muy bueno de mi parte.

Antoni nos ve y se acerca hacia nosotros, tiene la mirada diferente, como la primera vez que nos cruzamos, cuando estaba enfadado, tiene los labios apretados, desde aquí puedo ver su mandíbula apretada.
Se sienta a mi lado en una de las mesas y me mira, lo cual me intimida. Inmediatamente noto que Thomas también se tensa, hay un silencio sepulcral e incómodo, los dos me están mirando, fijamente, como si reclamarán una explicación con la mirada, así que procedo a hablar.

Emmm Thomas el es Antoni, Antoni el es Thomas –digo nerviosa.

– Es un placer Thomas –dice Antoni con seguridad, estirando su brazo para darse un apretón de manos.

– M-mucho gusto Antoni –dice Thomas titubeando, al parecer también le intimida su mirada, sus gestos, sus facciones, su tono de voz, todo.

– El es mi amigo desde la infancia –digo a Antoni señalando a Thomas– Y el es... Es... Lo conocí hace unos días –digo, ahora que me pongo a pensar no se que somos ¿Amigos? ¿Conocidos?.

– ¿De qué hablaban? –pregunta Antoni mirándonos curioso.

No sé que responder, no porque estuviera hablando de él, sino que el ambiente es incómodo

– Andrea me contaba que ustedes hoy iban a...

– ¡Salir! Sí, salir, los dos, juntos.

Eso quiere decir que Alexa no vendrá con nosotros, tal vez no puede, creo que sale de trabajar más tarde que Antoni y yo.

– Osea que ¿No vendrá Alexa? –pregunto suponiendo que su respuesta será que no.

– No, no puede venir, así que será mejor que vayamos a trabajar para que salgamos más rápido –dice Antoni levantándose de su silla y me mira, como si quisiera que yo haga lo mismo.

CAMINOS CRUZADOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora