Los Años Perdidos

Capítulo 35: The Last - Crónicas de la Desesperación Parte 2.

- "¡Hinataaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!" Habían pasado tres días desde que Naruto había perdido a la mujer de su vida en brazos de Toneri Ootsutsuki. Lejos de sentirse reconfortado luego de la conversación con su padre Minato, Naruto estaba inmerso en una profunda depresión. Había llegado al punto más crítico de la autoculpabilidad y sólo deseaba estar sumido en la obscuridad de la cueva en la que estuvo delirando y ensimismado en su profunda y agónica tristeza.

Shikamaru estaba desconcertado, no podía creer que su amigo, el que siempre era optimista ante las situaciones más adversas de la vida, el que había salido adelante ante las más dolorosas circunstancias de niñez, el que había salvado al mundo de las manos de Kaguya Ootsutuski y que prontamente lograría su sueño de ser Hokage, estuviera tan abatido por una pena de amor; se sentía impotente al ver a Naruto en esa situación y desesperado, recurrió al sarcasmo como último recurso para que Naruto volviera en sí:

- "¡No puedo creerlo, tarado! El ninja más fuerte de las cinco grandes naciones, ahí tirado en el suelo a causa de una mujer... ¡Qué fastidio! no mereces ser Hokage si una chica te patea el trasero..."

- "Ahh, eres tú Shikamaru... vete al demonio y déjame en paz" Naruto se sentó entredormido.

- "¡Mendokusei! El más excepcional de los Shinobi me está enviando al diablo... ¿Acaso pasó algo entre Hinata y tú? me vale una mierda si te quieres desquitar conmigo, pero te digo algo, no me importa. Si tú y ella tienen asuntos pendientes arréglenlos cuando estemos de regreso en la aldea. Como capitán de esta misión es mi deber rescatar a las hermanas Hyuuga cueste lo que cueste y eso te incluye a ti" Shikamaru seguía respondiendo con el mismo sarcasmo a lo que Sai intervino en la conversación:

- "Sabes Shikamaru, estoy muy seguro que algo ocurrió entre ellos dos. Porque sabes, Naruto, en medio de tu delirio no dejabas de llamarla a cada instante, le prometías amarla por el resto de vida, llenarla de besos en todo el cuerpo si volvía contigo, por no decir más, (risas), realmente dijiste cosas vergonzosas como que la harías sentir mujer, prometiste besarle sus senos, tocar su suave piel, recorrer con tu lengua su espalda, entrar a hurtadillas y robarla de su casa, que ibas a besarla y lamerla por todo el cuerpo hasta que tú y ella se fundieran en un solo ser y harí..."

- "¡CALLATE SAI!" Naruto volvió a acostarse sobre el frío suelo, derramando amargas lágrimas de sus ojos. Shikamaru y Sai pudieron ver y casi sentir el dolor de su amigo, sin embargo, Shikamaru tenía clara su misión y necesitaba a Naruto para ello, aun así, seguía increpándolo:

- "Mira tarado, sé que no eres el más brillante de los ninjas, pero, pensaba que por lo menos serías capaz de rescatar a la mujer que te rechazó"

- "Ya veo, tienes un punto débil y uno muy divertido, un lado muy dulce para alguien que se precia de rudo como tú, me diste mucho material para mi investigación..." Sai remató a un adolorido Naruto.

Naruto seguía ignorándolos a ambos, a lo que Shikamaru dijo finalmente: "Sé dónde puede estar Hinata y te recuerdo que, si la abandonas como compañera de equipo, no serás más que escoria, arrogante y egocéntrica escoria" ante esto Naruto reaccionó furioso:

- "¿Por qué me molestas? ¿Te causa mucha diversión mi tragedia de vida?"

Shikamaru levantó agresivamente su voz:

- "¡No me importa si haces de tu vida una novela! Además, tarado quiero informarte que estamos en medio de un territorio bastante adverso; ni siquiera estamos en nuestro planeta como para pensar que estamos en nuestros terrenos y tendríamos alguna ventaja... Para nuestro infortunio, nos encontramos en la luna y el lugar donde Sakura exterminó al gran cangrejo, era el portal que comunicaba la tierra con este lugar, así que piénsalo Naruto... Piensa si quieres dejar a Hinata y a Hanabi abandonadas a su suerte en este tétrico lugar"