Sí, un baile.
Un maldito baile.
Y justo el día en el que tenia que contarme algo.
Hermoso.
Pero me arme de paciencia. El podrá resolverlo, pensé. Eso esperaba.
Mi madre me tubo dos horas y media probándome vestidos. Como si fuera a cumplir quine años. Odio esa obsesión de las madres por esas cosas. Al final, me eligió, pues no pude opinar, un vestido blanco y largo. Estaba encantada con que su hija fuera a un baile.
Hable con Vale y Serena mucho de eso. Valeria estaba encantada. Hablaba todo el día de que su vestido, su pareja, su peinado, etc.
Serena, en cambio, estaba bastante apesumbrada. Para consolarla, le dije que yo odiaba los bailes y que nadie me había invitado.
Por el momento.
Y digo por el momento porque, esa misma tarde, encontré un mensaje en mi ventana:
"Μην με παρεξηγείτε, αλλά θα θέλατε να πάτε μαζί μου στον χορό;"
¿Quién más podía ser?
El único que sabia que yo sabia Griego.
Ese día, corrí por todo el pueblo hasta encontrar a Jeff. Fui clara.
–Xérete óti tha élega nai akóma ki an mou zitoúsate na perpatíso stin Kína, allá, metaxý ólon ton anthrópon, eíste o mónos pou písteve óti den tha eícha sýntrofo. Eseís, proskaleíte kápoion?
Él me miro y se ruborizo.
–Min paraponetheíte, to égrapsa se esás sta elliniká giatí pethaíno apó ntropí. Elpízo aplós na min me koroïdévoun gia to choró me tin trelí gynaíka pou fovátai tis motosiklétes.
Me reí y lo deje en paz.
Los dos en paz.
Pero no dejaba de pensar en el baile.
Jeff parecía tranquilo. Estaba segura que tenia un plan.
Pero... ¿Qué plan?
Tendría que esperar a su ejecución.
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Lissa X Jeff (PAUSADA)
RomansaLissa se ha mudado con su familia a un pueblo cercano a un bosque donde desapareció su padre hace años. Pronto hará buenas amigas y pasará grandiosos momentos con ellas. Pero la felicidad estará contrastada: En los límites del bosque, Lissa descubri...
