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Epílogo

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"A Change is Gonna Come" - Sam Cooke "Wondrous Place" - the Last Shadow Puppets
"The Subarbs (Cont'd)" - Arcade Fire
"You've Got the Love" - Florence & the Machine "Perfect Day" - Scala
"I'm Set Free" - The Velvet Underground
"Play With Fire" - The Rolling Stones
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Louis es un muy buen novio.

Como, un extremadamente buen novio. No-no 'bueno.' Increíble. Devoto. Magnífico. Espléndido.

¿Estúpido, tal vez? ¿Chiflado? ¿Un poco como un cachorro baboso?

Bueno, de todas formas.

Louis es una buena persona y esa es la única razón por la que está haciendo malabarismos con cinco cajas de panadería en sus brazos ahora mismo -todas llenas con varias masas finas, decoradas de forma precisa, cuidadosa y exquisita- subiendo este maldito tramo sin fin de escaleras en espiral a las habitaciones de Zayn.

El esfuerzo es real.

Cuando finalmente llega a la cima y se las arregla para lanzarse a través de la puerta mientras mantiene su punto de apoyo y equilibrio, con lo primero que es recibido es con una mesa impecablemente preparada -para cinco- y los ojos de plato de Harry parpadeando con ansiedad, con dos flores muy grandes y muy diferentes en cada mano.

"¿Cuál de estas susurra 'vamos a extrañarte, pero estamos entusiasmados por tu recuperación segura'?" Es lo primero que dice, acorralando a Louis y empujando las flores en su rostro.

Louis mira entre las dos, lo suficientemente bien versado en los Harry-ismos para abstenerse de protestar (sin importar qué tan inconveniente pueda ser-sus brazos están matándolo y el cartón está clavándose en sus bíceps) antes de suspirar, observando la rosa de color azul pálido que tiene levantada a la izquierda y al lirio magenta y oro a la derecha. Y continúa mirándolas, un poco desconcertado.

¿Cuál fue la pregunta, de nuevo?

"Erm," dice, sus bíceps gritando en protesta, y se reajusta la pila en sus brazos. "¿La de la... derecha?"

Los ojos de Harry casi se salen de su cabeza ante la mera insinuación.

"¡No, Lou! No, esa es demasiado chillona," Harry lo regaña, su voz de barítono al borde de sonar aguda. Oh, querido señor. "¿Siquiera has escuchado una palabra de lo que te he dicho en todo el día? ¿Acaso te importa lo de hoy? Ni siquiera estás tratando de hacer que este almuerzo sea agradable para Liam. Tu sólo-"

"Whoah, whoah, alto allí, Rizado, espera," Louis se precipita, ahogando los pucheros de Harry.

Con un suspiro de exasperación, se desliza por delante de él, estableciendo las cajas en la mesa - con cuidado de evitar la porcelana y las ingeniosamente plegadas servilletas- antes de darse la vuelta y quedar pie contra con él, acunando inmediatamente su rostro con puchero entre su manos.

Así que va a ser uno de esos días.

"Harold," comienza, sintiendo una sonrisa formarse, y los ojos de Harry caen a su boca. "Sé que quieres hacer que esto sea perfecto para Liam-"

"Él va a ir rehabilitación, Louis. Por supuesto que tiene que ser perfecto-"

Louis le hace callar con el dedo índice, empujándolo contra el cojín de sus labios.

"Sea como sea, va a ser perfecto, independientemente de las flores que decidas poner sobre la mesa."

Harry casi grazna ante eso, pero Louis presiona su dedo más profundamente, sintiendo las crestas de los dientes de Harry bajo su piel.