flores : taekook

O4.

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Una vestimenta casual, una pizca de maquillaje y unas cuantas gotas de perfume fueron suficientes para que Jeon Jungkook estuviese listo y saliese de su hogar en dirección a la dichosa cita.

Se tomó su tiempo al caminar, ya que todavía faltaba tiempo para la hora acordada. Aprovechó aquellos minutos para respirar profundamente y relajarse, tenía los nervios a flor de piel porque hace mucho tiempo que no disfrutaba de nada que tuviera que ver con el amor.

Sus experiencias anteriores siempre habían fallado, debido a que la mayoría de chicos se acercaban a él con dobles intenciones, y él al ser tan ingenuo no se percataba de esos detalles, tan sólo caía en sus redes sin preocuparse y después terminaba llorando a mares en los brazos de Taehyung.

Agradecía muchísimo tener a un amigo como su menor, aunque a veces deseaba que fueran algo más que eso. Hace un par de años se había dado cuenta de que sus sentimientos por el pelinegro no eran tan simples como pensaba, gracias a que las famosas mariposas en el estómago comenzaron a hacer aparición cada vez que se encontraban cerca, sobre todo cuando este le daba muestras de cariño o lo llamaba con apodos lindos. Pero a pesar de eso, Jungkook siente que sus sentimientos no son correspondidos, y cree que Taehyung sólo se preocupa porque siente lástima de su situación.

Todos sus pensamientos sobre su vida amorosa se esfumaron cuando chocó con un alto chico, se podría decir que igual o más alto que Taehyung. Al parecer había estado tan concentrado pensando, que no notó por donde iba caminando ni tampoco que ya había llegado al lugar de la cita.

Se alejó enseguida del cuerpo desconocido para poder ofrecerle una disculpa por su torpeza, pero no esperó encontrarse con un alumno de su escuela.

"¿Eunwoo?"

"¿Jungkoo? Qué sorpresa, estaba buscándote"

"¿Tú eres el de la carta?" preguntó el castañito notablemente sorprendido.

"Sí, soy yo. ¿Te parece si comenzamos con nuestra cita?"

El castañito asintió tímidamente ante lo dicho por el mayor, y sin esperar más ambos empezaron a caminar por el parque sin ningún rumbo fijo, hablando de diversos temas y riéndose de algunos chistes que contaba el más alto de los dos.

Hicieron una corta parada en la que Eunwoo le compró un helado a Jungkook, luego reanudaron la caminata hasta llegar a un lugar que el menor consideró realmente hermoso. Había una banca en medio, rodeada por muchos árboles y flores de muchos colores diferentes, el lugar era demasido bonito.

Tomaron asiento en la banca mirándose a los ojos y Eunwoo tomó las manos de Jungkook, inclinándose hacia adelante hasta chocar sus labios con los del contrario cremado un beso. Lentamente, el movimiento de labios fue subiendo su intensidad y las manos del mayor fueron a parar a la cintura de Jungkook. Luego de algunos segundos, el agarre de este se dirigió al trasero del castaño.

En ese momento el miedo comenzó a apoderarse de Jungkook, por lo que intentó alejarse pero Eunwoo no se lo permitió, intensificando la presión que ejercía con sus manos. El más pequeño en un acto desesperado empujó con todas sus fuerzas al mayor, liberándose del agarre.

"¿Qué te sucede, idiota?" preguntó con temor.

El menor estaba asustado, no había gente alrededor y dudaba que si gritaba alguien fuera a escucharlo, Eunwoo era más alto que él y posiblemente más fuerte también, estaba notoriamente en desventaja.

Jungkook se paralizó cuando el mayor iba cada vez acercándose más y más, quería correr, quería gritar tan fuerte pero su cuerpo no reaccionaba.

"¿De qué te quejas? ¿Creíste que te cité aquí para hablar cuentitos de amor? No seas tan ingenuo, Jeon. Todos te quieren para esto y yo no soy la excepción, así que ven aquí y terminemos lo que comenzamos"

Tras esas palabras, Jungkook comenzó a recordar todas las veces en las que se había visto en la misma situación, siendo tocado sin su consentimiento. Taehyung siempre llegaba a salvarlo, pero esta vez no lo haría, porque él mismo se había encargado de alejarlo con sus estúpidas ilusiones de que esta vez iba a ser diferente.

Cerró sus ojos con algunas lágrimas escapándose de ellos y cedió ante el toque de Eunwoo, sin ganas de luchar por algo que ya consideraba perdido. De pronto, sintió que las manos de aquel chico ya no estaban sobre él, por lo que abrió los ojos encontrándose con el cuerpo del mayor en el suelo y Taehyung propinándole golpes reiteradamente. 

Al comienzo no lo creyó, pero luego de pestañear un par de veces para asegurarse de que lo que estaba viendo era real pudo darse cuenta de que sí, Taehyung había llegado para salvarlo otra vez.

El pelinegro detuvo los golpes cuando sintió que era suficiente -no realmente- y se puso de pie estrechando fuertemente a Jungkook en sus brazos, dándole vueltas en el aire y besando todo su rostro.

"Lamento tanto haber llegado tan tarde"

"Y yo lamento haberte tratado mal ayer, tú tenías razón después de todo"

"No te preocupes por eso" dijo Taehyung secando un par de lágrimas de su hyung. "Lo importante es que tú te encuentres bien, ¿ese imbécil te hizo daño?"

"No, TaeTae. Y me siento bien ahora que ya estas aquí"

Mantuvieron el abrazo por unos minutos hasta que decidieron que ya era hora de volver a casa donde Jungkook se sentiría más cómodo y seguro, aunque ya se sentía lo suficientemente a salvo estando en los brazos de Taehyung.
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