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  Aquel día, Jungkook había despertado más tarde de lo normal. No tenía que ir a clases, por lo que podía dormir sin preocuparse de escuchar a su madre llegar a despertarlo para vestirse. El fin de semana era uno de sus momentos favoritos, podía ir al parque a jugar con su hermano y su papá, practicar deportes en los que no era muy bueno pero que lo ayudaban a mantenerse fuerte, tan fuerte como puede mantenerse un niño de 10 años.

  Jungkook era muy feliz, sus padres lo adoraban y tenía una relación hermosa con ambos. Eran de esas familias perfectas, felices, a las que todo el mundo aspiraba a ser y Jungkook era el hijo menor, por lo que el amor era algo de sobra para él y siempre se sintió agradecido.

  Decidió levantarse porque su estómago estaba rugiendo de hambre y cuando vio la hora eran cerca de las 2 de la tarde. Realmente había dormido mucho pero eso no era lo raro, lo raro es que nadie lo había despertado, ni Beomgyu, ni su padre, ni siquiera su madre pasó a despertarlo de un beso en la frente como otros días y eso significaba que algo andaba mal, porque Jungkook podía ser pequeño pero no era tonto.

  Salió de su habitación y fue directo a la de su hermano pero ahí tampoco había nadie. "¿Será que salieron y se olvidaron de mí?" Pensaba Jungkook mientras caminaba por el silencioso segundo piso de su casa, ya se estaba comenzando a asustar. Bajó las escaleras y fue directo a la cocina, quizás estarían preparando el almuerzo pero allí no había nada más que un vaso roto, por lo que salió pensando que el viento lo había botado. Se dirigió a la sala y ahí pudo ver a su madre, recostada en el sillón con ambas manos cubriendo su rostro.

- ¡Mami! - dijo Jungkook feliz al encontrarla pero ella no respondió - ¿M-Mami? ¿Dónde está p...?

  No se dio cuenta en qué momento apareció Beomgyu y se lo llevó de ahí hacia el patio, a paso muy rápido, como si estuvieran huyendo de ahí y claramente Jungkook notó a su hermano muy agitado.

- ¿Qué pasa, Yu? - le preguntó el pequeño apenas llegaron al patio. Pudo ver cómo su hermano mayor tenía un mano marcada en su mejilla y los ojos hinchados por haber llorado - ¿Qué... qué tienes?

- Jungkook, en estos momentos no es seguro que estemos cerca de mamá, ella... está muy alterada y es un poco peligroso - Beomgyu estaba hablando en un susurro y Jungkook se enojó por lo que su hermano acababa de decir "¿No confiar en mamá? Está loco..."

- No digas esas cosas, Beomgyu Jungkook lo regañó - ¿Qué pasó?, ¿Dónde está papá? Le diré que estás diciendo cosas feas.

  Beomgyu tenía 15 años y siempre lo protegía, eran muy unidos y Jungkook podría decir que lo quería casi tanto como quería a sus padres. Pero odiaba cuando el mayor se ponía maleducado "pubertad..." decía él, sin tener idea de qué significaba esa palabra.

- Jungkook... necesito que hablemos. Yo... quiero que me escuches y que confíes en mí. Sé que puede ser raro e incluso difícil pero no importa qué, tú y yo estaremos unidos siempre, yo lo prometo, ¿tú lo prometes? - preguntó Beomgyu mientras estiraba su meñique frente a Jungkook.

- Por la garrita - dijo Jungkook mientras unía su pulgar al de su hermano. Beomgyu lo miró con dulzura.

- Sé que yo no soy quien debería decirte esto, pero mamá no lo hará. Necesito que seas un niño fuerte ¿está bien? Un niño grande y fuerte - después de un breve e incómodo silencio continuó - ¿Recuerdas que últimamente papá estaba llegando a casa muy tarde del trabajo? - Jungkook movió su cabeza en afirmación - ¿y que papá y mamá ya no dormían juntos?

Just forget the world • TaeKook/VKook •Donde viven las historias. Descúbrelo ahora