MATRIMONIO CONCERTADO *KOOKV* (Terminada)

9.- Un recuerdo de ti

"Cuando te aferras a la esperanza no hay poder que logre dejar de insistir, sin embargo, toda esperanza tiene un tiempo limitado, a veces es la razón o el dolor que nos lleva a rendirnos y dejar ser"

Luna

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El joven matrimonio arribó al rancho de los Jeon, el omega se encontraba extasiado, jamás imaginó estar rodeado de tan bellos paisajes, el ambiente lo tranquilizaba, formulando en su pequeña cabeza mil escenarios románticos, haría gala de las novelas que había leído hace algún tiempo. Al salir de la mansión se puso como meta enamorar a su bello alfa, porque había descubierto gracias a las pláticas con sus amigos y a los recuerdos con sus padres que el alfa azabache era su destinado ¿Cómo llegó a la conclusión? Con vergüenza preguntó a los miembros de la familia por el olor que desprendía el alfa, todos sin excepción alguna le dijeron que los olores de azabache eran roble y vainilla, al escuchar ello negaba incontables veces, la señora de la casa se extrañó por la negatividad del joven omega y no dudó en preguntarle el motivo, llegando a ello a comentar que él lograba olfatear el chocolate en el alfa. Grande fue la sorpresa y la emoción de la omega Jeon que abrazó con emoción al pequeño omega, recalcando que eran destinados. "Sólo un destinado puede oler el tercer aroma en su pareja", eran las palabras que la señora de la casa, sus padres y sus amigos le habían dicho. Y con ello se propuso enamorar a su destinado, nadie le quitaría su otra mitad. Con esos pensamientos se adentró a la hacienda dispuesto arriesgar todo por conseguir su meta.

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Ahí se encontraba el castaño, frustrado, triste y decepcionado, no contaba con ese pequeño detalle, el alfa al llegar había ordenado que se preparara otra habitación, dejando claro que no compartirían cama, en su momento quedó en shock, sin embargo, no se permitió deprimirse, al contrario, le mostró una muy particular sonrisa al azabache haciéndolo gruñir. Y ahí estaba, tumbado en la gran cama planeando, nada interferiría en sus planes.

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Al azabache se encontraba en el despacho, nada más llegó y se fue a refugiar en ese espacio que recordaba con ahínco. Se cuestionaba su actitud ¿Cómo era posible que esa simple sonrisa haya logrado sucumbir en su interior? Debía alejarse del omega a como diera lugar, ansiaba dormir y despertar en la fecha tan esperada, su divorcio con cierta criatura que se había vuelto su mayor tortura. Cerró los ojos y se permitió viajar una vez más a esa noche, a ese momento que lleva tatuado a fuego en la piel.

POV DE JUNGKOOK

El alfa menor de los Jeon no despegaba la vista de la mesa de enfrente, logró ver cuando Jimin ayudaba a Taehyung a incorporarse, sin embargo, el castaño no pudo mantener el equilibrio y gracias a la acción rápido de Seo Joon lograron mantenerlo en pie, se dirijieron al baño de los omegas, hasta cierto punto no había pasado nada extraño, hasta que pasado un rato llegó J- Hope al lado del azabache: "Hey JK deberías ir a los baños, al parecer Taehyung está en problemas", "No me interesa" contestó cortante, "Vas porque vas, él es tu responsabilidad" y sin más se llevó al alfa del brazo a regañadientes. Al llegar al baño se encontraron con dos omegas llorando y dos alfas a punto de pelear.

"¿Qué está pasando aquí?" Indagó el azabache, ambos alfas se voltearon a ver de dónde provenía la voz y justo cuando Park Seo Joon iba a contestar, el omega corrió al encuentro con el azabache aferrándose a su cuerpo: "Kookie estás aquí, vaámonos por favor, e-e-ese alfa intentó be-besarme, le di-dije que tenía alfa pe-pe-pero no me creyó, me acorralóoo a la pared, Kookie sácame de aquí por favor" fueron las palabras del omega, dejando a todos impresionados, Jungkook se mareó con el olor a miel que llegó a sus fosas nasales, aferró al omega a sus brazos y dirigió su penetrante mirada a los alfas del fondo. Está de más decir que nadie movió un músculo, se sentía un aura oscura y fría en el ambiente; "Última vez que se atreven hacer algo ¿Quedó claro?" no necesitó usar su voz de mando, su sola presencia imponía miedo. Se giraron sobre sus talones, llevando al castaño hacia la salida...

Ya en la limosina el omega no dejaba de estar aprensando el brazo del alfa quien arrugaba la nariz de vez en cuando, estaba harto de ese olor, le desagradaba que el castaño oliera a pimienta, era el olor del alfa que intentó besarlo. Sin previo aviso separó al omega y se dio cuenta de su estado, estaba embriagado, sus pupilas estaban dilatadas, gruñó en molestia: "Kookie, no me dejes ¿Por qué no me quieres?, yo te quiero muuchooo, nooo, yo-yo te a-a-mo, por favor no-no- me dejes" se volvió acurrucar al pecho del alfa, quien se quedó estático por las palabras antes mencionadas.

Al arribar a la mansión le pidió de favor a Minho que llevara al omega a la habitación, ni bien había subido unos escalones de la entrada escuchó un potente llanto, se giró y vio al castaño forcejeando con el beta: "No, no me toques, quiero a mi alfa, Kookie por favor, no me abandones, no dejes que me toque", y se derrumbó al frío piso, el alfa ya frustrado se restregó la cara y fue al encuentro con el omega, lo cargó pasando su mano derecha bajo las piernas y la izaquierda en la espalda media del omega, se adentró a la mansión. Una vez llegó a la habitación depositó al castaño en la gran cama, sin embargo, éste se negaba a soltar al alfa, "Kookie, no me sueltes, te a-a-mo, ¿Por qué no me quieres? ¿He sido malo? Dime que no te gusta de mi y lo cambio, pero por favor, no me dejes", se aferró al azabache escondiendo su cara en el cuello, aspirando el dulce aroma a chocolate, el alfa trataba de zafarse del agarre sin lograrlo, de un momento a otro, el castaño tomó al alfa de las mejillas y fue acercando su rostro hasta depositar sus labios sobre los del azabache, su nula experiencia solo le permitió posar sus labios, el alfa impresionado se dejó llevar debido a que lo inundó el rico olor a miel, empezó un suave beso, saboreando los labios ajenos y ¡Rayos, sabían tan bien a fresas! Tan suaves, tan dulces, se dejó llevar, se embriagó por el deseo, se recostó sobre el omega sin llegar a aplastarlo, el beso fue subiendo de intensidad, el calor corporal se extendió y dio rienda suelta a la lujuria, poco a poco empezó a deshacerse de la ropa del castaño, mientras más besaba, más deseaba conocer al omega bajo suyo, estaba tan extasiado que perdió el control de sí mismo, dejando paso a su lobo quien no tardó en demandar al omega como suyo, ambos pares de ojos se dejaron ver, el intenso rojo del alfa y el dorado del omega: "MI OMEGA, AL FIN ESTÁS JUNTO A MI", "MI ALFA, TE ENCONTRÉ DESPUÉS DE TANTO TIEMPO", siguieron besándose, tanto omega alfa se encontraban solo en ropa interior, sin embargo, el omega dejó de corresponder a los besos del alfa, eso llamó su atención y al abrir los ojos se dio cuenta que el omega se había quedado dormido, suspiró frustrado y aliviado, trató de calmar el latir acelerado de su corazón y de bajar un poco su calor corporal, se maldecía internamente ¿Cómo diablso habían llegado a eso? Se supone que él no se siente atraído por el castaño, entonces ¿Por qué llegó a ese extremo?, no se permitió ver al omega debajo suyo, sin pensarlo más, levantó su camisa del suelo y se la colocó al castaño evitando mirar y tocar su piel más de lo necesario, al corroborar que ya estaba medio vestido y dormido, lo dejó ahí y se dirigió al baño para darse una ducha de agua fría, sería una larga noche.

FIN DEL POV

Abrió los ojos, se sentía acalorado, ¿Cómo era posible que ese simple recuerdo lo excitara de sobre manera? Él no era así, él decidía en que momento excitarse y con quien, tenía demasiado autocontrol para estás cosas, entonces ¿Por qué con el castaño esa noche no pudo contenerse? Tocó sus labios con la yema de sus dedos, hormigueaban, aun podía sentir el dulce sabor de las fresas en ellos: "Rayos ¿Qué mierda me pasa?", en eso la puerta fue abierta dejando ver a una silueta: "JK te extrañé tanto" canturreó la figura...

¿Puede un alma guardar tanto amor? ¿Podrá el pequeño castaño llegar al corazón de su amado?