Vi como se alejaba con su grupo de amigos a seguir jugando basketbol. Todavía estaba enojada, pero no tanto. Esa mirada me daba algo de miedo. Aún enojada seguí caminando por el parque y cuando sentí mis piernas empezar a cansarse, me senté en uno de los bancos.
Cerré los ojos por un momento y sentí la fría brisa volar con mi cabello. Me sentía mas tranquila ahora. Cuando abrí los párpados veo unos ojos verdes mirándome y sonriendo me doy un salto para adelante y choco con la cabeza de esa persona.
-¡Auch!.-Se queja Chad al chocar mi frente con la suya.
-Oye, casi me das un susto de muerte Chad.-Dije tocando me el corazón que latía rápidamente.
-Lo siento. Es que te veía tan pacifica y tranquila con tus párpados cerrados y esa hermosa sonrisa que tienes.-Dijo Chad sonriendo me y me sonrojo al instante.
-Gracias.-Le digo aun colorada.
-De nada.-Me sonríe.
Me quedo un rato tranquila pensando hasta que llego a la realidad.
-¡Chad!.-Digo y salto de la sorpresa.
Este asustado me mira con los ojos abiertos como platos.
-¿Que pasó?.-Pregunta exaltado.
Lo abrazo sin previo aviso haciendo que nos caigamos juntos al pasto verde que hay. Cuando me iba a desapartar de el, nuestras caras están a sólo centímetros de distancia. Si me muevo o hago un movimiento en falso, lo beso.
Chad empieza a reírse al darse cuenta que no me muevo arriba de él. Así que rápidamente me muevo y me paro. Le extiendo la mano y lo ayudo a pararse.
-Se que soy irresistible. -Dijo Chad guiñando me un ojo.
-Tarado.-Dije nerviosa.
-¿Por qué me has abrazado?.-Pregunta.
-Oh. Es que me sorprendí verte aquí. ¿Qué haces aquí?.-Pregunté.
Chad toma unos segundos antes de responder.
-Vivo con mi abuela en unas cuantas calles después del parque y quise venir a dar una vuelta por aquí.-Respondió de lo mas simple. Aunque pude notar algo de nerviosismo.
-Interesante.-Dije.
-¿Y tú? ¿Qué haces aquí?.-Preguntó Chad divertido.
-Vivo por aquí. Y como me mude, quise conocer un poco esta ciudad.-Dije normalmente.
-Genial, somos vecinos.-Dijo Chad contento.
Es cierto. Seremos vecinos.
-Eso es bueno.
Chad y yo empezamos a hablar y a conocernos mejor. Hablábamos de cualquier cosa que nos a pasado, anécdotas, etc. También me contó de su familia. Y yo le conté de la mía.
-Hey Chad.-Llame al chico. Este me estaba prestando atención.-¿Quién es Josh?-Pregunte curiosa.
El chico a mi lado se tensa y aprieta los puños hasta dejar los nudillos muy pálidos.
-Josh Svenson es el muchacho mas frío del instituto. No tiene amigos, o por lo menos eso dicen. Nunca a peleado. Siempre está en el rincón del instituto con un libro que sólo él entiende. No le gusta estar cerca de las personas. Se dice que jamás en su vida a pedido perdón. Ni siquiera cuando era pequeño lloraba.-Me contaba Chad con cada palabra. Yo le apreste atención hasta el final.
Ahora me sentía mucho mas nerviosa y desesperada. Yo le había hablado mal. Seguro me matara o algo peor. Espero que no sean de esos hombres que abusan de las mujeres.
Chad al ver que me ponía nerviosa y tensa, me miró y hizo que sonriera.
-¿Por qué preguntas sobre Josh?.-Preguntó Chad frunciendo el ceño.
-Yo..-No le podía contar. Pero al ver que él era la única persona que había sido amable en hablarme, le conté todo lo que pasó. Cuando terminé de contarlo, él se tensó y se paró de su asiento.
-Lo voy a matar.. ¿Cómo se atreve a hacerte eso?.-Dice Chad enojado.
Yo alarmada. Agarro a Chad del brazo cuando veo que empieza a caminar en dirección hacia donde está Josh.
-No lo hagas. No vale la pena.-Dije un poco mas tranquila.
Chad me miro con esos grandes ojos verdes que tiene y me sonrió con dulzura.
-Esta bien.-Dijo y se sentó de nuevo.
(...)
Chad me acompañó hasta mi casa y me di cuenta que él vivía al lado mio. Él se despidió de mi con un beso en la mejilla y entro a su casa. Entré a la mía y me fui hacia mi habitación.
Me puse a escuchar musica y a cantar y saltar arriba de la cama como loca. Me gustaba este país. Me sentía mejor que nunca. Mi madre entra a la habitación sorprendida por mi autoestima.
-No pares hija. Nunca te había visto tan feliz. Sigue, sigue.-Decía mi madre incitándome a seguir.
-No, esta bien madre, ya terminé. ¿A que has venido?.-Pregunto.
-Te quería decir que ya estas apuntada en un instituto. Esta a 20 minutos caminando y 10 en auto. Tú eliges.-Dijo mi madre sonriente.
Que bien, una nueva cárcel a donde ir. Donde volveré a sufrir bullying. Solo pensaba en mi mente.
-Oh, que divertido.-Dije con sarcasmo. Mi madre lo notó.
-Solo te falta un año Carly. Terminarás pronto.-Decía mi madre.
-Si, como digas madre.-Dije desanimada.
-Empiezas el lunes.-Dijo mi madre y salió de mi habitación.
Me acosté en mi cama cansada e irritada. Jodido instituto. Espero que no me hagan bullying. Seré una persona nueva. No dejaré que me hagan mas bullying. Y me dormí de lo cansada que estaba.
*Al día siguiente *
Hoy es lunes. Un jodido lunes. Fui a la ducha como un zombie. Tenia la cama pegada. Estaba realmente espantosa. Me di una relajante ducha y me puse lo primero que encontré.
Me cepille los dientes y me hice una coleta alta. Bajé con mi mochila hacia el living y me senté en el comedor. Mi madre había preparado pan con nutella y zumo de naranja. Que rico. Le agradecí a mi madre y empecé a comer mi rico desayuno. Terminé de comer y me despedí de mi madre para ir al instituto.
Salí por la puerta y empecé a caminar. Entonces escucho un ruido y volteo a la puerta de donde vive Chad. Chad esta saliendo por su casa y debo decir que se vé bien. Éste me mira y sonríe.
-¿En cual instituto estás?.-pregunto.
-The High School institute. ¿Y tú?.-me pregunta.
-¡Genial!.-Exclamo.-Estamos en el mismo instituto.-le dije a Chad y éste me abrazó y después empezamos a hablar mientras caminábamos para el instituto.
Él me hablaba sobre las cosas que debo y no debo hacer en el instituto.
Me la pasaba muy bien con Chad. Llegamos y ahí lo vi a él.**********************************************************
Hola chicas. Kiara la hija de Carly en la foto.
Voten y comenten y el próximo capitulo lo subo largo. ¿A quien vio Carly? Tan, tan, tan...
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Éste Es Mi Pasado
Mystery / ThrillerNunca se imaginó lo que pasaría si se acercaba a él, porque sólo él podía salvarla de lo que pasará...