MACABRO #PGP2024

Capítulo 1: Tragedia

Belfort.
03/09/ 2021.

La joven de 20 años, Sarah Andrews, sentía que lo tenía todo en la vida, y aunque no fuera así, para ella era más que suficiente, no porque fuera conformista, sino por estar orgullosa de lo que había logrado siendo tan joven. En dos años más acabaría su carrera y finalmente saldría de ese absurdo pueblo que durante tantos años la había reprimido y guardado dentro de sus muros. Belfort tenía un extraño magnetismo que evitaba que sus habitantes salieran al "mundo exterior", pero ella estaba dispuesta a ser la excepción.

Por años trató de convencer a sus padres de mudarse a una ciudad más grande, a una ciudad dónde sería imposible conocer a todos sus habitantes, no como en Belfort, dónde todos se conocían. Para ella era agobiante.

- Prometan que no se quedarán despiertos, si se pasan de su hora de dormir su madre estará muy enojada - Sarah se dirigía con dulzura y firmeza a los dos pequeños a los que cuidaba. Will, de 6 años y Maikol, de 8.

- Lo prometemos – respondieron ambos pequeños mientras le regalaban una tierna.

- Así me gusta. Ahora - Les acomodó la sábana que los cubría - Cierren los ojos, y a dormir - pidió ella con una sonrisa. Ambos niños hicieron caso, cerraron sus ojos y esperaron a conciliar el sueño, el cual no tardó mucho en llegar.

Al ver que los niños habían hecho caso, Sarah caminó hacia la puerta y salió, no sin antes dejarla un poco abierta, ayudando a que el miedo de los niños a la oscuridad disminuyera.

Tras bajar por las escaleras y ver el desorden que habían dejado los niños suspiró, debía recoger aquel desorden dejado por los dos pequeños huracanes, por lo que amarró su perfecta cabellera castaña, pero al inclinarse para tomar el primer juguete, el teléfono principal de la casa sonó. Imaginando que solo los padres de los niños llamarían a las 10:30 de la noche, se apresuró a responder.

- Residencia Johnson, buenas noches - no obtuvo respuesta.— ¿Señora Johnson?— pensó que quizás podría ser la madre de los niños.

- Estoy en la puerta principal - dijo una voz que sonaba claramente distorsionada por alguna aplicación. Sarah era lista, la más lista de su clase, de hecho, así que rápidamente reconoció la voz.

- Buen intento Marcus, sé que eres tú - se burló ella. Marcus era uno de sus amigos de la universidad, no iba ni en su clase ni en su semestre, pero todos lo conocían por dar las mejores fiestas de la ciudad y ser un bromista nato. Muchos incluso lo apodaban "Thor" en alusión a su aspecto físico, semejante al de Chris Hemsworth, alto, piel clara pero semi bronceada, mandíbula cuadrada, cuerpo atlético y por supuesto, una hermosa y brillante cabellera dorada.

- ¡Demonios!— escuchó que se quejó del otro lado de la línea - ¿Qué me delató? Fue la voz ¿Cierto?

- No, pero soy muy lista como para caer en tus bromas – se burló ella.

- Bueno, tenía que intentarlo — bromeó él.

- ¿Para qué llamabas? De todos modos - preguntó curiosa.

- Para invitarte a la fiesta que haré el viernes, todo el mundo irá - aseguró.

- Pudiste decírmelo mañana en la universidad, hoy es domingo - dijo jugando con un mechón de su cabello aún en una coleta.

- Era una buena excusa para hacerte la broma - se escuchó una ligera risa tras decir eso.

- Te veo mañana, Thor - se despidió ella antes de poner el teléfono en su sitio.

A Sarah le divertía lo ingenua que sus amigos creían que era. Sabía que Marcus era fan del género slasher, así que si alguien iba a hacerle ese tipo de bromas, claro que sería él. Aún así amaba verlo intentar y fracasar en sus intentos por jugarle bromas.