Capítulo 4: Pocos oficiales y mucho que proteger

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El estridente sonido del despertador casi provocó que Lucas se precipitara de su cama, pero afortunadamente logró mantener el equilibrio. Aunque se sentía agotado, consciente de que apenas había descansado durante la noche, sabía que debía levantarse porque tenía clases.

- Veo que ya estás despierto - anunció su madre al entrar en la habitación.

- Hola, mamá - respondió Lucas. Iba a desearle "buenos días", pero su jornada ya había comenzado de forma poco auspiciosa.

- Steven se fue hace algunos minutos y me dejó dicho para ti y tu hermana que no habrá clases ni hoy ni mañana, miércoles - informó su madre

- ¿Por qué no me llamó? - se preguntó en voz alta, más para si mismo que para su madre. A pesar de ello, ella respondió.

- Dijo que lo hizo - afirmó su madre. Lucas revisó su celular, pero al tocar la pantalla este no respondió. Estaba apagado.

- Que extraño, estoy seguro de que lo dejé cargando anoche - aseguró Lucas.

- Fue un día agotador, estabas bajo mucho estrés. Es posible que lo hayas olvidado - sugirió su madre comprensiva.

- Sí, tal vez - aceptó Lucas resignadamente.

Claudia, su madre, salió de la habitación y dejó al chico solo, lo cual él agradeció. De esta manera tendría la oportunidad de dormir un poco más e intentar descansar.

°°°

- ¿Le dijiste? - preguntó Lauren una vez que su madre bajó por las escaleras y se acercó.

- Sí, se lo dije - respondió Claudia Christie sentándose junto a su hija - Hija, tú me dirías si algo malo estuviera pasando, ¿verdad? - Lauren miró extrañeza a su madre

- Claro que sí, mamá... te lo diría - respondió fingiendo seguridad lo mejor posible. Su madre sonrió.

- Siento que algo pasa con tu hermano, algo no tan bueno. Eso me preocupa - bajó la mirada, enfocando su vista en una pequeña hormiga caminando por una de las hojas de la planta en el centro de la mesita de café.

- Mamá, no tienes de que preocuparte, Lucas está bien. Quizás solo un poco estresado por todo lo que ha pasado – Lauren mintió tan bien que ella misma casi cree su mentira. Por suerte, eso logró calmar a su madre.

- De acuerdo – la mujer sonrió - Pero por favor, está al pendiente de él, ¿si? - Claudia Christie sabía lo responsable que era su hija, por lo que confiaba en ella ciegamente.

- Claro - Lauren asintió regalándole una sonrisa compasiva a su madre. Aunque luchaba contra cada célula de su cuerpo para no decirle la verdad a su madre, cada vez le resultaba más difícil.

Afortunadamente el resto de la mañana pasó con tranquilidad. Eran pasadas del medio día y Lucas aún no despertaba, lo cual le dio más tiempo a Lauren de analizar su muy difícil situación. Tras pensarlo mejor recordó a aquel detective, Matthews. Aunque únicamente había pasado un día, ella creía que tal vez sería buena idea visitar la estación. Con algo de suerte ya tendrían un poco más de información del caso.

- ¡Regreso en un rato mamá! - exclamó Lauren sabiendo que su mamá estaba en la cocina, la cual se acercó rápidamente al escuchar a su hija.

- ¿A dónde irás? - le preguntó secando el agua de sus manos con el delantal atado a su cadera.

- Iré a ver a Savannah, quiero saber cómo sigue - más mentiras.

- Ve con cuidado, por favor - le pidió acercándose a su hija y besándola en la frente. Lauren asintió con una sonrisa y salió. La estación de policía estaba algo cerca, pero no lo suficiente como para caminar hasta allí, sobre todo no con tanta luz solar, así que tras caminar un poco un taxi pasó junto a ella en la carretera, Lauren extendió su brazo y este se detuvo.

MACABRO #PGP2024Donde viven las historias. Descúbrelo ahora