DEBAJO DE MI CAMA

1 0 0
                                    

Cuando era pequeña pensaba que había monstruos debajo de mi cama.

Cada noche revisaba en los rincones y le temía a las sombras proyectadas por la oscuridad.

Poco a poco fui creciendo y así también fui entendiendo que no había monstruos debajo de mi cama ni mucho menos en mi ropero.

Los únicos monstruos se encontraban en las calles, disfrazados con trajes y caras bonitas que ocultaban la maldad que en ellos había.

Antes solía temerle a mi habitación, ahora le temo a lo qué hay fuera de ella.

PoemarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora