NO ERES TÚ

CAPÍTULO 2

CANDY

Levante la mirada y me encontré con unos ojos azules profundos. Los nervios me invadieron al ver a un apuesto joven.

—¿Qué hace una bella dama sin compañía?

—Muchas gracias—respondí con el cigarrillo en los labios— pero lamento decirle que no estoy sola.

—Señorita, su compañía es de dos bellas damas como usted, no una compañía masculina—me sorprendí con su respuesta — la estuve observando desde que llegó y ahora tengo la oportunidad de acercarme a usted, permítame invitarle su siguiente bebida.

Imaginé que era unos años menor que yo, hace muchos tiempo no tenía este tipo de atención en mi. Normalmente hubiera rechazado su invitación, pero no lo hice. Sus palabras me cautivaron y me llenaron de expectativa,  quería saber que más pasaría.

Llegué junto a él a la mesa donde me esperaban mis amigas, ellas se quedaron en silencio al verlo. Una sonrisa irónica se dibujo en el rostro de Annie mientras que las mejillas de Patty se pusieron muy coloradas.

—Este joven, se ofreció muy amablemente a pagar nuestra siguiente ronda de cócteles chicas—dije, mientras lo miraba me perdía en su mirada.

—Permítanme presentarme bellas damas, mi nombre es Terrence Grandchester —mis amigas nos miraron a ambos con curiosidad.

—¿Ustedes se conocen? —preguntó Annie.

Antes de que yo respondiera, Terrence se adelantó.

—Esa es mi intención, conocer a su hermosa amiga.

Las tres nos presentamos a Terrence, él no paraba de observarme cada vez que hablaba, miraba mis labios y de rato en rato recorría mi cuerpo con su vista.

La actitud que él tenía hacía mi, me hizo sentir una mezcla de sentimientos encontrados. Me agradaba tener la atención de un joven agradable y muy apuesto, tenía curiosidad de saber quien era, pero a la vez me sentía mal por aceptar la invitación de un desconocido.

—Candice, iremos al tocador un momento, espera aquí por favor, luego nos iremos juntas—exclamó Annie.

Por mi mente pasaron muchas ideas, pero la que más me atraía era quedarme con él a solas.

—¿Cuántos años tienes? —le pregunté.

—Los suficientes para estar aquí con usted —respondió con una sonrisa de costado que me dejó deslumbrada.

Cuando estaba por hacerle otra pregunta, mi teléfono empezó a vibrar, Annie me envió un mensaje de texto.

Candice querida, no queremos ser violinistas en este encuentro inesperado con Terrence, parece ser un caballero, aprovecha esta oportunidad que no se da todos los días y vive una aventura, eres joven y hermosa. Mañana será otro día y esta noche quedará en el recuerdo.

Terminé de leer el mensaje sorprendida por el consejo de mis amigas, levante la vista y miré directo a Terrence—¿Se encuentra bien? —musito.

Por primera vez en mi vida, tomé una decisión sin pensar en las consecuencias.

—Terrence ¿Te gustaría ir a otro lugar? — mi propuesta lo dejo sin palabras por unos segundos, así que pensé que no deseaba irse con una mujer mayor que él .

—Esperaba ser yo quien le hiciera esta proposición, pero veo que es una mujer que sabe lo que quiere.

Se puso de pie y me ofreció su mano para ayudarme a ponerme de pie, al sentir el contacto con su piel, mi mente se nubló por completo, una electricidad recorrió mi cuerpo, me jalo hacia él posesivamente rodeándome con sus brazos, deposito un suave besos en mis labios aumentando la intensidad cada segundo que pasaba.