Llegué a casa con la cara empapada de lágrimas, recordé todas las palabras de louis y creía que moriría, no soportaba este dolor así que me consolé a mi mismo creyendo que en parte tenía razón. De tanto llorar me dio sueño, opté por tomar una ducha y luego dormir y así fue.
Escuché el ruido de mi puerta abriendose y me desperté, era mi madre, había dormido lo suficiente.
-Cariño, ¿te dormiste temprano hoy?- dijo mi madre preocupada
- Sí madre- respondí, mientras me acomodaba mi cabelloMi madre salió de la habitación y se fue a su cama, luego escuché a mi padre entrar a mi cuarto.
-¿Qué tal tú primer día de escuela?- dijo mi padre emocionado
-Bien- dija a secas
-Bueno..., descansa.
Mi padre salió, seguí durmiendo hasta el día siguiente.
Obviamnete al día siguiente no hablé con louis y así fue por todo una semana