código de amor en el fin del mundo

Capítulo 41 - La segunda hermana necesita orinar

"Tú ... ¿De qué estás hablando?" Harry se acercó con curiosidad y Sis Lim le dio una palmada en la cabeza, “¡Hazte a un lado! ¡Los hombres no deberían estar involucrados! "

La hermana Meizi inmediatamente usó su mano para bloquear a Harry. Extendió el cuello y miró con curiosidad. No había nadie más porque todos habían terminado de tomar el pan y el agua.

Sis Lim sacó una caja de papel de debajo de la ventana y la puso en mi caja de metal. Cuando Harry vio la caja de papel, se sonrojó y se dio la vuelta para mirar hacia arriba como si estuviera contando estrellas.

Miré la caja que me había pasado Sis Lim. El empaque fue exquisito. Todo aquí se hizo de forma rudimentaria, excepto esta caja; estaba bien hecho. El empaque no estaba dañado y tenía hermosos estampados que eran atractivos para las niñas. Obviamente, era una caja de toallas sanitarias de calidad.

Eso es extraño. ¿Cómo puede estar tan bien hecho esto, también en un mundo sin recursos?

"No hay muchas niñas aquí y hay muchas toallas sanitarias de este tipo en los sitios históricos ...", explicó Sis Lim. Por lo tanto, no se hizo aquí, sino que quedó del pasado. Debido a que la población de mujeres había disminuido significativamente, también lo había hecho la demanda de toallas sanitarias, lo que hacía que las toallas sanitarias encontradas en los sitios históricos fueran suficientes. Entonces, ¿habría más necesidades femeninas en este mundo?

La hermana Lim sonrió y me miró: “Si no tienes suficiente, puedes venir y tomar más. ¡Este es un beneficio especial para las mujeres aquí! " La hermana Lim me dio unas palmaditas en la mano y me cubrió la toalla sanitaria con una toalla. Ella era cariñosa y cariñosa.

Con eso resuelto, finalmente me sentí a gusto. Fue entonces cuando sentí que era problemático ser una niña. Si el fin del mundo no tuviera estas cosas, ¿cómo podrían vivir las niñas?

¿Por qué se encuentra esta cosa en un sitio histórico? El sitio histórico se conoce como edificios que quedaron atrás desde la antigüedad. Este es el fin del mundo ... ¿¡Significa que se refieren a la ciudad original !?

¡Ciudad!

“¡Luo Bing! ¡Luo Bing! ¿¡Puedes escucharme!?" De repente, la voz apresurada de Raffles resonó en la plaza. Provenía de los altavoces: “Por favor, regrese a mi almacén de mantenimiento cuando reciba este mensaje. Algo no va del todo bien con la Segunda Hermana. ¡Date prisa, date prisa y vuelve! " La voz de Raffles temblaba al otro lado del micrófono. Sonaba asustado.

"¡Oh no! La Segunda Hermana no estaría pensando en comerse Raffles, ¿verdad? Harry se puso ansioso, "¡Todavía no ha desayunado!"

Desde el momento en que salvé a la Segunda Hermana, Harry y Raffles me habían estado recordando los instintos ofensivos extremadamente fuertes de un cadáver volador. No hace falta decir que había sido testigo del poder de un cadáver volador con mis propios ojos. Su garra había perforado un agujero en la cápsula de escape y mostraba claramente que era muy ofensiva.

No debería dejar sola a la Segunda Hermana con Raffles. Es mi descuidado error. Soy demasiado terco. La Segunda Hermana confía en mí, pero eso no significa que sea amigable con todos. Debería haber escuchado sus sugerencias. Estaba demasiado confundido en ese entonces.

Recogí mi caja e inmediatamente regresé corriendo.

“¡Waifu! ¡Camino equivocado! ¡Aquí!" Harry me tomó del brazo y comenzamos a correr juntos.

"La Segunda Hermana no lastimaría a Raffles, ¿verdad?" Pregunté mientras corría. Estaba preocupado y sentí pena al mismo tiempo.

Harry corrió y respondió: “Waifu, en este mundo hay cosas limitadas para comer, incluso para los humanos. Dime, ¿¡qué puede comer un cadáver volador !? "