̀Smells//YunGi.

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De vuelta en el parque, Mingi se encontraba sentado en una de las mesas que daban al área de cafetería. Cuando Yunho perdió todo rastro de San, buscó con la mirada a Mingi. Cuando le vio, caminó hasta él y se encontró en su frente, suspiró, ya era el momento. Dejó su bolso en la mesa para facilitarse las cosas, pero no tomó asiento. Cuando obtuvo la interrogante mirada de Mingi, se apresuró a hablar.

─Ahora sí, ¿Se puede saber qué rayos te pasa, Mingi? ¿Por qué fuiste tan descortés con San?

─Descortés es el hecho de que lo hayas invitado sin siquiera decírmelo antes. Se suponía que este era nuestro momento, sólo nosotros dos, sin nadie más, pero tú.. tú tenías que invitarlo a él ¿por qué razón? Al menos debiste avisarme.

─Okey, tienes razón, debí avisarte primero, lo lamento, fue mi error, pero aun así, no tenías porque ser tan cruel con él, no tiene la culpa de nada.

─Agh, ya ¡perdón! ¿contento?

Yunho suspiró tratando de buscar calma, se estaba desesperando ante la actitud del contrario y no quería iniciar una pelea.

─¿Por qué actúas así, Mingi?

─¿Así cómo? ¿Mm?

─¡Como si estuvieras celoso, Mingi! ¡Dime qué te pasa!

Yunho no pudo aguantarse más e hizo lo que menos quería, gritarle, pero ya no podía controlarse, estaba cansado de la actitud de Mingi. Las personas que pasaban por ahí les miraban expectantes, sin embargo no sorprendidas. "Típica pelea de novios" pensaban la mayoría.

Por otra parte, Mingi se heló en su lugar. Sí estaba celoso, pero no lo quería admitir, su mente se negaba a aceptar el hecho de que estaba empezando a sentir cosas por Yunho, o mejor dicho, que ya sentía.

─¡No es así! ¿Por qué debería estar celoso? Los amigos no se ponen celosos y tú.. ¡No me gustas! ─Dijo a la defensiva, no quería aceptarlo.

Yunho sólo le miró incrédulo, mientras sentía como gran parte de su corazón se encogía y se hacía añicos.

─Que mal por mí, porque tú sí me gustas. Eres un estúpido, Mingi.
Se regañó internamente por ofender al menor así, pero ya no podía medirse. Tomó su bolso de la mesa, y se fue. Más que molesto, se sentía herido. No sólo porque sus sentimientos no eran correspondidos, sino también porque nunca había peleado con él así. Las pocas veces que pelearon habían sido cuando eran pequeños, y sólo por boberías. Esta era la primera vez que peleaba seriamente con él, y deseaba a morir que fuese la última, se sentía horrible. Le dolía pensar en que todo podría terminar ahí. No más amistad, no más apodos, no más tarde de videojuegos, y lo peor, no más de tener al otro en su vida.

Por otro lado, Mingi estaba helado en la silla, ¿Qué había escuchado? Le gustaba a Yunho, y él lo único que hizo fue ignorar todo este tiempo sus sentimientos, pisotearlos, no sólo los de Yunho, también los de él.

Siempre que se moría por ver a Yunho, abrazarlo, besarlo, se excusaba con la misma mentira: "Es mi amigo, sólo lo extraño mucho". Pero su corazón sabía que no era sólo su amigo, era algo más, su otra mitad, su motor, su alegría, también su tristeza, su dolor. En todas las situaciones, buenas o malas, siempre podía apoyarse en Yunho, él siempre estaba ahí para lo que necesitaba. Sabía que no encontraría a alguien como él en ninguna otra parte, pero lo había arruinado.

Tardó una hora más en entender que la razón del porqué se había sentido así en el parque, del porqué siempre quería besarlo y estar con él no era sólo porque lo extrañaba, sino que le gustaba Yunho. Nunca vio venir el tiempo donde sus sentimientos evolucionaron a algo más por aferrarse a la idea de que sólo tenían una amistad. Se sintió mal, por lastimarse y lastimarlo, por perderse el hermoso momento donde empezó a ver a su amigo con otros ojos.