— ¿De verdad harás esto?— preguntó Kei a Kuroo.
Ambos caminaban por las calles de Tokio en rumbo a un estudio de tattoos que le recomendaron al azabache.
— No tengo opción, perdí la apuesta.
— Solo un idiota apostaría con Yaku.
— Supongo que lo soy— suspiró el mayor— Además no es tan malo, solo es un tatuaje.
— Si tú lo dices.
— ¿Nunca has querido tatuarte Tsukkishima?
— Hasta ahora no. No creo que se vean bien en mí.
— Estoy nervioso Tsukki.
— No me digas así Kuroo. ¿Ya sabes que vas a tatuarte?
— Claro. Una rosa en el costado y dos K's en la muñeca.
— ¿Kenma Kozume?
— Sí.
— Pffft. Cursi.
— Fue lo mejor que se me ocurrió, no seas malo.
— Ya, según el GPS es aquí— dijo Tsukkishima mirando el estudio de tatuajes frente a ellos.
Era un local pintado de negro, lo usual para un estudio de tatuajes.
Ambos entraron y había un neón con el nombre del estudio."Roses and needles"
El lugar ciertamente tenía un estilo muy punk, pero aún así era lindo.
Se dirigieron a la recepción donde un chico delgado de tez blanca y cabello grisáceo estaba tras el mostrador coqueteando con otro chico de cabello negro y corto que estaba frente a él.
Kuroo carraspeó la garganta interrumpiendo el momento y entonces el chico de cabello gris le dirigió su atención.
— Daichi, nos vemos al rato ¿si? Debo trabajar.
— Te amo cielo.
— Y yo a ti.
El chico de cabello oscuro se marchó en una motocicleta, entonces el chico del lunar en la mejilla habló.
— Bienvenidos a Roses and Needles, lamento que hayan visto eso, pero tenia mucho sin ver a mi novio.
— Oh, no te preocupes— contestó cortésmente Tetsuro.
— Gracias, pero díganme, ¿en qué puedo ayudarlos? ¿tienen agendada una cita con algún tatuador?
— De hecho sí, agendé con Yamaguchi, me lo recomendaron mucho.
— Es un tatuador increíble, por favor pasen es la segunda puerta del pasillo. Ahora mismo está libre.
— Gracias— contestaron ambos chicos.
Kei y su mejor amigo se adentraron en aquel cuarto donde un chico estaba bailando alegremente mientras acomodaba sus instrumentos.
— Hola, eh...— habló Kuroo.
El chico pegó un brinco y se volteó rápidamente para mírarlos.
— ¡Lo siento! ¡No los oí entrar!
A los ojos de Kei era el chico más lindo que había visto en toda su vida.
Tenía la piel acaramelada y llena de pecas, el cabello algo largo y atado en un moño, con la parte de la nuca decolorada.
Sus orejas estaban perforadas varias veces, y al parecer tenía delineador negro enmarcando sus ojos. Vestía una camiseta negra con algunos agujeros, unos skinny jeans del mismo color y unas converse, también negras.
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Tsukkiyama Week 2021
Fanfictionone shots hechos con las prompts de la Tsukkiyama week 2021:)