"tu y yo siempre "

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Mientras tanto en la mansión Agreste, Gabriel trabajaba en su nueva colección para la semana de la moda en Hong Kong, este solía estresarse mucho ya que era muy minucioso y perfeccionista en todas y cada una de las prendas que confeccionada, Además de que estaba nervioso porque por primera vez Adrien había ido a la escuela, Gabriel era muy sobreprotector ya que decía que el mundo exterior era cruel y Adrien era todo lo que le quedaba, o quizás también esa linda secretaria, pensó el platinado

- pero que tonterías estas pensando Agreste - dijo en voz alta

Pero era verdad sin duda Nathalie era una mujer muy bella, con finas facciones, ojos grandes azules como el mar y una piel pálida como la nieve.

Agg- gruñó - Qué me pasa porque no dejo de pensar en ella- se cuestionó

Gabriel trató de concentrarse otra vez en los bocetos de sus diseños, pero era imposible por qué en los últimos días había estado pensando tanto en Nathalie? , tal vez era porque la veía todo el día.....

- Si eso es - dijo el diseñador, y volvió a dibujar en el monitor

cuando de pronto escuchó unos Golpes en la puerta del estudio

- Si adelante - dijo el rubio, la puerta se abrió, era ella la causante de que Gabriel estuviera tan distraído

- Disculpe señor Agreste sólo quería informarle que Ya dejamos a Adrien en la escuela - dijo Nathalie

-Esta bien, ahora dejame solo necesito concentrarme en los bocetos - dijo serio
- Si señor Agreste, con permiso - sin mas la azabache dijo y se fue

cuando Gabriel se quedó solo inmediatamente se vino una imagen de Nathalie a su cabeza Pero esta vez era diferente ella posaba un hermoso vestido azul cielo , con escote en forma de corazón, en el escote tenía una especie de encaje azul marino, el vestido era pegado con corte sirena.

Rápidamente comenzó a dibujar en la gran pantalla, sin duda era un vestido hermoso digno de admirar, hace mucho tiempo que no le venia una inspiración así, no desde que Emilie se había ido.

Será que el corazón del diseñador vuelva a tener inspiración? o algo más que todos le decimos amor.