7º Regla: No pasa nada por ser traicionado, pero no lo hagas tú

661 43 11
                                    

NO PASA NADA POR SER TRAICIONADO, PERO NO LO HAGAS TÚ

Revise mi celular buscando mensajes o correos nuevos, pero no había recibido ninguno. Kaede no volvió aparecer por la escuela al día siguiente después de la última vez que lo vi, de la nada se había esfumado sin dar explicaciones. El director había notificado que Kaede debía ausentarse un tiempo por un asunto familiar.

Lo llame y le envié textos sin recibir ningún tipo de respuesta de su parte, después de unos días me resigne. Pensé que si era paciente, me contactaría en cualquier momento. Él me había dicho que debíamos hablar, así que suponía que debía decirme algo importante. Además, yo aún debía disculparme con él.

"Debe estar molesto después de todo, no lo culpo" pensé melancólicamente.

- Nozomi - me llamo un chico de cabellos castaños, Akira - ¿Está bien que vayamos a tú casa?

- Por supuesto - le respondí con una sonrisa, guardando mi celular - ¿Por qué la pregunta?

- Bueno... es que... - empezó a jugar con sus dedos.

- Lo que Akira quiere decir... - intervino un chico de cabellos rojizos, Yuta - ¿Que si le parece bien a tu "tutor" que vayamos a su casa sin previo aviso? - dijo juguetón.

- Por supuesto que está bien, son mis amigos. No pasará nada, además, él casi nunca está en casa por trabajo - dije mirando por la ventada del auto.

- Además... - Yuta mira de reojo a Kai, quien estaba al volante - Tu chofer es un poco... intimidante.

- Oh ¿Kai? No te preocupes por él, siempre es así con los extraños - dije sin rodeos.

Akira y Yuta se volvieron mis amigos hace aproximadamente un mes. No se habían acercado a hablarme porque siempre estaba con Kaede, quien emana un aura de superioridad un tanto intimidante para el resto de los estudiantes aunque a mí no me parezca así.

- Ya llegamos, Nozomi-sama.

Mis amigos se impresionaron al ver la majestuosa casa.

- ¿En serio vives aquí? - pregunto Yuta. Yo solo asentí mientras abría la reja de entrada.

- Cool... - dijo embobado Akira.

- Vamos, entremos - reprimí una risa.

- Espere un momento - Kai intervino en mi camino cuando estuve a punto de abrir la puerta - Hay algo extraño - abrió lentamente la puerta y saco su arma - Esperen fuera, por favor.

Kai se adentró sigilosamente en la residencia hasta que lo perdimos de vista. Mientras más se tardaba en salir, más me inquietaba.

- ¿Que sucede? - pregunto Akira nervioso - Se está tardando demasiado.

- Si... ¡Kai! – grite su nombre.

Después de unos segundos salió.

- Parece que un intruso irrumpió en la casa en las últimas horas - dijo tomando su celular. Marco un numero de teléfono y hablo con alguien llamado Kira, después de un breve momento de discusión telefónica, colgó - No es seguro aquí, Nozomi-sama - dijo empujándonos fuera - Llevaremos a sus compañeros a sus respectivos hogares y nos reuniremos con Munezaku-sama.

- ¿Qué hay de Shiro? - pregunte por mi gato - Debe estar dentro - dije preocupado.

- Nos ocuparemos más tarde, no podemos perder tiempo.

- ¡¿Cómo puedes decir eso?! - grite y lo hice a un lado para adentrarme a la casa, la cual estaba hecha un desastre.

Todo estaba fuera de lugar, como si hubieran estado buscado algo. Lo único intacto era mi habitación.

I love you with my life (yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora