Reki y Langa son los príncipes herederos de dos importantes reinos y desde niños son comprometidos para unir ambas naciones.
•AU
•Omegaverse
•Basado en el anime Sk8 the Infinity (por lo tanto los personajes no me pertenecen)
Se que me tardé una eternidad pero esta historia debía acabar ya.
Gracias por tomarse el tiempo de leer esto y esperarme.
Espero que les guste.
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Langa se arregló la corbata frente al espejo y practicó una sonrisa. Esta salió un poco temblorosa pero no opacaba para nada felicidad que el joven desprendía.
—Príncipe Langa—Cherry, el consejero de su reino, entró a la habitación. Tenían puesto un elegante traje de gala y su largo cabello rosa atado en una coleta—¿Estás listo?
—Creo que sí.
El pelirosa se acerca y le acomoda la cinta que sostiene su cabello en un moño bajo. Su cabello había crecido un poco más y solo por petición de Reki no lo había cortado.
—¿Nervioso?
—Un poco—admite—Pero estoy más emocionado. Es un día especial.
—Lo es—Cherry le arregla una última vez la camisa y sonríe en grande—Es hora.
Ambos caminan codo a codo hasta llegar a la sala del trono qué ahora está ricamente decorada con flores bancas, azules y rojas, telas y un gran tapete color vino que marca un sendero desde la entrada hasta el trono.
Sus padres y los de Reki están ahí parados, con sus mejores galas, sonriendo intensamente.
El sonido de las trompetas anuncia el inicio de la ceremonia y todos se quedan callados.
El ensamble de cuerdas empieza a tocar la marcha nupcial y las puertas principales de la gran sala se abren.
Por ahí entran las dos princesitas del reino de las tierras calidas, Chihiro y Nanaka, con una canasta para tirar pétalos por todo el camino.
Después aparecen Koyomi y Miya quienes sostienen un par de cojines donde están los anillos.
Finalmente, como los primeros rayos del sol entrando por una venta, Reki hace acto de presencia.
Su traje es similar al de Langa, pero el prefirió remangarse la camisa hasta los codos, su brillante cabello rojo está atado en una moño bajo y sostiene un ramo de rosas blancas, azules y rojas.
Se ve hermoso y Langa solo quiere correr para abrazarlo y llenarlo de besos.
Joe, como el fiel guardia que cuidó a Reki desde sus nacimiento, lo sostiene del brazo y lo escolta hasta llegar al pie del trono.
