Capitulo 74

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La Tierra es uno de los planetas más avanzados ecológicamente.

        Cuando se descubrió el planeta por primera vez, la población interestelar estaba asombrada.

        Es una pena que los terrícolas de aquella época hayan perdido casi todas las buenas condiciones ecológicas, pero ahora sólo pueden garantizar unas condiciones de vida normales.

        No todo el mundo está dispuesto a viajar a la Tierra sin ningún beneficio.

        Al fin y al cabo, la Tierra es un buen planeta para visitar en vacaciones, pero definitivamente no es la mejor opción.

        Los Territorios del Noroeste tenían algo que hacer cuando decidieron volver a la Tierra.

        Tong Xiao, por su parte, también sentía mucha curiosidad por su planeta natal.

        Cuando estaban en la Tierra, permanecían en las montañas durante muchos años y nunca habían estado en ningún otro lugar.

        Pero el hecho de que estuvieran dispuestos, no significaba que los ancianos estuvieran de acuerdo.

        No quería volver a hacer negocios con un par de tipos que no se podían molestar.

        Entonces no podría tener un viaje tranquilo.

        "¡Sólo quiero ir!" Tong Xiao dio una palmada en la mesa, mostrando sus dientes de tigre con saña, como un ginseng salvaje con el pelo frito.

        Maonci ni siquiera le miró.

        Fue Deyur quien se sorprendió un poco; el bajito era gracioso cuando tartamudeaba.

        "¡Co-coo-coo-coo!" Dandan saltaron, él también iba, tenía tantas plumas escondidas en su nido, que tenía que traerlas todas.

        Fatty no quería ir, pero cuando escuchó lo que dijo Dandan, también quiso volver, así que inclinó medio cuerpo regordete y dijo: "Yo también voy, tengo que desenterrar un poco de bambú y volver para comerlo".

        A diferencia del tartamudeo del mayor, Poor dijo con voz delgada: "yo voy".

        De este modo, los cuatro se decidieron a volver a la Tierra.

        Maonci estaba tan molesto que quería convertirse en su forma original y esconderse, así que dijo: "Entonces no iré, deja que Zuo Lan vaya".

        "No voy a ir, todavía tengo que dar a luz a mis cachorros". Zuo Lan se negó sin siquiera pensarlo, criar a esos mocosos era mejor que quedarse aquí y tener bebés con Angus.

        "¿Tener bebés? ¿Con quién vas a tener bebés?" La mirada de Angus no cambió mucho, pero levantó ligeramente las cejas, lo que asustó a Zuo Lan para que se tapara la boca y mirara a Maonci, haciéndole cavar un agujero.

        Maonci se rio aún más: "No contigo, planeando tener un nido de ratas cazadoras de tesoros".

        ¿Una camada de ratas cazadoras de tesoros?

        Esta afirmación hizo que las caras de toda la sala se volvieran extrañas.

        Los que sabían y los que no, todos dejaron caer sus miradas sobre el cuerpo de Angus.

        El rostro de Zuo Lan era sombrío y hosco, pero Angus se reía alegremente, y cuanto más se reía, más nervioso se sentía.

        Tong Xiao se tocó los brazos, temblando de frío.

¿De quien estoy embarazada‽Donde viven las historias. Descúbrelo ahora