Hoseok miraba a Yoongi quien se veía en el espejo.
-Verdad que es hermoso, se escoger muy bien a las personas.
Yoongi soltó un vago suspiro y se hablo así mismo.
-Sera momento de volver a amar, será momento de olvidar lo que pasó.
Hoseok agachó su cabeza, era extraño que Yoongi hablara sobre amar a otra persona, se puso de pie y rió de manera nerviosa.
-Es evidente que debes de amar a alguien, después de todo yo estoy muerto.
Yoongi se enjuagó la cara y atravesó a Hoseok sin darse cuenta, había quedado con Jimin para poder recomendarle que tipo de perro adoptar, Hoseok al ver que lo atravesó se quedó ahí parado, cómo deseaba estar vivo para ver a Yoongi, para abrazarlo, para sentir esa calidez, se dirigió a dónde el pálido se encontraba y se acosto junto a él.
-Te extraño mucho -Dijo mientras acariciaba su cara- te extraño mucho Yoongi.
Yoongi sintió un extraño frío, tomo una manta que estaba cerca de la cama y se cobijo, su corazón latía fuertemente, hacía mucho tiempo que no sé sentía así. Aún recuerda aquella tarde de invierno, ese café al que fue él y su amigo de preparatoria.
Esa tarde lo observo ahí, estaba sentado viendo a la nada, aún recuerda esa hermosa cabellera rizada, aquella mirada como de esperar algo y no obtenerlo, aún recuerda la calidez del chico, su risa y su llanto.
Hoseok soltó una lágrima, se puso de pie pensando en por qué esa había Sido su suerte, vio al ángel que estaba ahí cruzado de brazos.
-Lograste lo que querías ahora vámonos.
-Espera, aún no pasan los tres meses.
-Escuchame, no tienes que hacer esto, con el tiempo esto se acomodaría, tú solo...
-Por favor, dame solo este tiempo, no me quedaré por más tiempo aquí.
El ángel suspiro cansado de dicha situación.
-Te doy un mes, no más.
-Un mes es muy poco tiempo, necesito más tiempo...
-No lo haces, lo único que haces es ser egoísta, no quieres dejarlo por qué piensas que te olvidará, así que tienes un mes.
El ángel se fue, Hoseok solo se abrazo así mismo, tal vez tenía razón, tal vez era egoísta.
