Recogido por el Villano Escoria.|SAVE

El protagonista abandona al villano.

—¡Luo Binghe! — Yue Qi coloco sus manos delante de su boca tratando de que su voz llegue aún más lejos en el espeso bosque, miró al rededor y temió que alguien antes que él haya encontrado a Luo Binghe y lo haya llevado con él con mentiras y propósitos indecorosos, una cara tan bonita como la de Luo Binghe no se desperdiciaría en los trabajos normales de cualquier esclavo, el corazón de Yue Qi duele un poco, incluso si nunca pudo generar algún tipo de sentimiento filial con ese niño, Shen Jiu lo hizo; también, Shen Jiu le confió encontrar al niño y mantenerlo a salvo de los Qiu y de cualquier peligro en general. — ¡Luo Binghe! ¿Dónde estás?

Solo después de que Shen Jiu volvió sin el pequeño Luo Binghe y Shi Wu lo apunto como el que había herido al caballo del joven maestro Qiu, y Shen Jiu no lo negó ni lo acepto, es que Yue Qi comprende que Shen Jiu está tratando de proteger al pequeño niño.

La cuenca de sus ojos no pudo abrirse más o probablemente sus globos oculares rodarían al piso, era la primera vez que Shen Jiu estaba intentando proteger algo, algo que no es su comida, su dinero, su ropa o la paja de su cama en la vieja cabaña de esclavos, y Yue Qi se pregunta que tan malo como ser humano debe ser para sentir envidia del pequeño Luo Binghe.

Las manos de Yue Qi están fuertemente cerradas en un puño luego de que el sonido de una bofetada resuena en ese pequeño y repugnante callejón. Quiere abrir la boca, dar un paso al frente y regresar la bofetada que el joven maestro Qiu le dio a Shen Jiu, pero cuando Shen Jiu lo mira entre la multitud que se ha formado, mayormente otros esclavos, sus dueños y algunas personas que vienen a mirar, Yue Qi se paraliza.

Shen Jiu le dice con los ojos que esto es culpa suya. No de Shi Wu por ser un bastardo, no del joven maestro Qiu por encontrarlo más interesante que a un perro, no de Luo Binghe por herir al caballo del joven maestro Qiu con los trucos que muchos cultivadores errantes utilizan para impresionar a cualquier campesino y conseguir un poco de comida o dinero, Yue Qi no lo entiende, ¿de dónde aprendió Luo Binghe eso? sin embargo, no importa, porque para Shen Jiu, Yue Qi es el único culpable de que ahora este siendo vendido por tres monedas de cobre a ese joven maestro Qiu Jianluo.

Hay un zumbido de voces al rededor, Shi Wu se ríe del destino que le depara al despreciable de Shen Jiu, Yue Qi entonces, hace una mueca de desdén y esa voz que no es amable ni benevolente para nadie que no sea Shen Jiu le dice que debió escuchar a Shen Jiu cuando le dijo que no era su problema; debió escuchar a Shen Jiu y volver con él y Luo Binghe, no estarían en esta situación si Yue Qi hubiese dejado de lado su falso e hipócrita acto de hermano mayor.

—¡LUO BINGHE! —Grita más fuerte, pero su respuesta solo es el silencio que viene acompañado con un sonido único del balanceo de las ramas del árbol gracias al viento, los grillos, las ranas y algunos otros animales, no hay un llanto de bebé ni una carita empapada en lágrimas corriendo hacia él porque esta aterrorizado de los sonidos y figuras del bosque. — Soy Yue Qi ¿Dónde estás Luo Binghe?

Yue Qi bajo las manos, respiro agitadamente y trato de aspirar aire por la boca, ¿realmente alguien más se llevó a Luo Binghe? o ¿fue él niño quien se marchó? Después de todo, si conoce un poco a Shen Jiu, está seguro que no le dijo al niño que estaba haciendo esto por su bien, si conoce a Shen Jiu y lo hace, está completamente seguro que simplemente tomo al niño, lo empujo al bosque y le dijo que se largara.

Cualquier otro niño se quedaría ahí paralizado del miedo y tristeza, pero Luo Binghe no era como cualquier otro niño... era el niño que Shen Jiu había criado por cinco años.