Tan dulce como tú | Kuroko y tú

Capítulo 8: "Te tengo a tí"

Bienvenid@s a Tan dulce como tú.

Ya han pasado unas semanas desde que Kuroko y yo confesamos lo que sentíamos.

Solo puedo decir que no sé si estamos bien, es decir, conversamos y todo eso, pero hasta ahora no hemos salido juntos solo nosotros dos. Mentiría si dijera que no tengo miedo que el se haya cansado de esto.

Justo ahora estoy junto a Riko y el equipo en el club de baloncesto.

—Bien, analizando su gran rendimiento tras el último partido contra Shutoku decidimos darles un pequeño descanso—dice Riko emocionada.

—¿No será de nuevo a la playa no?—dice Kagami preocupado por lo que sucedió en la playa.

—No, esta vez si van a descansar e iremos a unas aguas termales este sábado—dice ella sonriendo.

Todos salimos juntos del club y caminamos de regreso a nuestras casas.

—«¿Aguas termales? Tal vez pueda pasar tiempo con Kuroko»—digo para mí misma.

—¿En qué estás pensando?—dice Kuroko cerca a mi oido a lo que yo me sobresalto.

—Pensaba que cosas debo alistar, ¿Podrás ir?

—Si y quería preguntarte algo, ¿Puedo?—dice el rascando su nuca.

—¿Que pasó?—digo confundida.

—¿Quieres ir conmigo a comprar ropa hoy? Es que--

—¡Si!—digo lanzándome a sus brazos no dejándolo terminar de hablar—. «Esto contaría como una cita, ¿No?»—digo para mí misma.

—¿Puedes a las 3?—dice el acariciando mi cabeza.

—Si, te esperaré en la entrada principal del centro comercial—digo alegre.

Después de unas cuantas horas, estoy corriendo muy apresurada al centro comercial.

No fue buena idea tomar una pequeña siesta reparadora antes de mi encuentro con Kuroko. Y por la hora tuve que cambiarme de ropa con lo primero que ví.

Ya faltando poco para el centro comercial disminuyo el paso para recobrar el aliento.

—¿Ya habrá llegado?—digo suspirando.

Sigo caminando hasta llegar a nuestro punto de encuentro.

—¿(Tn)?—dice Kuroko parado frente mío a lo que yo me ruborizo.

Son pocas las veces en la que lo he visto con ropa informal y puedo confirmar que todo le queda bien.

¿Por qué no puedo dejar de mirarlo?

—¿Sigues ahí?—dice el moviendo su mano frente mi rostro.

—Lo siento, estaba pensando en que tienda ir—digo rascando mi nuca.

—No te preocupes. Tomemos nuestro tiempo—dice el caminando agarrado de mi mano.

Hemos pasado por varias tiendas y por alguna extraña razón siento como si alguien nos hubiera estado siguiendo. No sé si decírselo a Kuroko. No quiero que se preocupe.

—¿Que te parece?—dice Kuroko saliendo del vestidor con un conjunto nuevo.

—Te ves perfecto...—digo viéndolo a más detalle—. ¿Con cuál te vas a quedar?

—Creo que este y me encanta que sea ligero.

—¿Puedo tomarte una foto así?—digo sacando mi celular.