HIJA DE VIKINGOS

INTRODUCCIÓN

Soy Hildur, hija de Lagertha, pero no de Ragnar. Mi padre violó a mi madre y cuando yo nací me abandonó por no ser un niño, así que  Ragnar me acogió como su propia hija y él ha sido mi padre durante toda mi vida. Bjorn y Gyda, mis hermanos me cuidaron y enseñaron a vivir en la granja, mientras Ragnar y Lagertha me entrenaron para la batalla.

Cuando Ragnar derrotó al conde Haralson y se convirtió en conde de Kattegat, yo decidí marcharme a las montañas para vivir sola.
Me fui más arriba del monte donde se encontraba el Templo Upsala, desde aquí tenía vistas del mar, del templo y del bosque donde cazaría mi comida.

Aprendí a vivir de la naturaleza, intercambié carne de caza y pieles por un caballo negro, y varios animales de ganado. Sembré plantas como hacíamos en la granja y sobreviví muchos inviernos.

Hablaba con los dioses y los ofrecía sacrificios, y también cuidaba del Templo sagrado de Upsala.

Tuve que defenderme de varios ataques de Berserkers que venían a por mis animales y a por mis cosechas.

Cada cierto tiempo bajaba a los pueblos a comerciar y conseguir cosas que no me podía dar el bosque, y era entonces cuando escuchaba las historias del rey Ragnar. Mi hermana Gyda había muerto, y Lagertha se había divorciado de Ragnar, Bjorn se había convertido en un gran guerrero.
Eran tantas las historias...

El día que Odin me visitó decidí que ya era la hora de volver a mi hogar, de volver a ver a mi familia... o lo que quedara de ella.