Quatrième chapitre.

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Viaje al ministerio


"Nuevo hogar, nuevo sentimiento,
nueva vida... ¿y una apuesta perdída?"
-A.M.M


El tiempo habia pasado demasiado rapido para Harry, ya era domingo 31 de agosto, el dia de la prueba.

Habian pasado una semana desde que Harry se habia mudado al número 12 de Grimmauld Place. Kreacher lo atendia sin estar insultandolo a él o a sus amigos, más bien, llegaba a parecerse un poco a Dobby, cosa que alarmó a Harry y Ron, Hermione por su parte los reprendia por andar burlandose de el elfo domestico, recalcandoles que era un ser vivo y tenia sentimientos.

Pero dejando aquello de lado, y llendonos a lo serio, Harry estaba más que nervioso por que tendria que ir al ministerio y por lo que le contestó Hermione cuando le preguntó que era esa dichosa prueba de herencia, no pudo hacer nada más que ponerse más nervioso.

La castaña solo le respondió que era para ver sus origenes y confirmarlos, además de ver si heredó algo de sus antepasados, como sangre de criatura. Harry estaba nervioso por eso. En caso de tener sangre de criatura, ¿cual seria? Habia buscado e investigado un poco sobre el tema, y solo encontró unas pocas posibilidades. El sabia que no podia tener sangre Veela porque no habia nadie muriendose por él, además hace un siglo que no se veia un Potter con esa sangre. Tampoco podria ser un hombre lobo, el despertar de estos es a los 12 años. Mucho menos podria ser un vampiro, su despertar es a los 16. También estaba la sangre doncel, el tenia sus dudas, pues en su familia si habia esa sangre, aunque, como las Veelas, no se habian presentado hace mucho. A parte no tenia hombros finos ni risa melodiosa como se leia en los libros, asi que lo más probable es que fuera un mago común y corriente (en lo que cabe decir), ¿verdad?

Después de otra discución interna sobre si tendria herencia o no, se alistó, tomando la carta de encima de su cómoda, bajó las escaleras de su nuevo hogar para almorzar y se encontró con la mesa puesta, como ya hace unos dias se habia hecho costumbre. Una tarta de manzana, un platillo con una porción de esta, una porción de helado de chocolate, una porción de ensalada de zanahoria y lechuga junto a un capuccino moka; Kreacher sabia que cocinar para calmarlo. Se comió dos porciones de tarta de manzana, su porción de ensalada, su helado de chocolate y su capuccino moka.
Luego de terminar su desayuno, se dirigió a la puerta, la abrió y salió. La verdad no tenia ganas de usar la red flu, queria caminar y disfrutar del aire libre, pues desde que llegó a Grimmauld Place se quedó encerrado allí porque queria relajarse, y ahora que ya lo hizo quiere salir a caminar.

Llevaba su varita en el bolsillo, por si acaso. Las calles, de aspecto abandonado, estaban casi desiertas, pero cuando llegó a la desangelada estación la encontró llena de gente llendo y viniendo del trabajo. Le compró el boleto a una empleada super radiante que intentó coquetearle y pedirle su número de teléfono, él amablemente se negó. Divisó el número del tren que decia en su boletín y se subió, y justo a tiempo pues este ya se estaba llendo. Esperó exactamente cuatro paradas hasta llegar a su destino, metaforica pero literalmente. Se levantó de su asiento, se sacudió un poco su chaqueta de cuero negra, su camiseta de manga larga de color verde botella junto con su pantaleta negra hecha a la medida por la famosa diseñadora, ama de casa, madre de familia y guerrera, Molly Weasley.

Aprèss Le Guerre. [Drarry]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora