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── ¡Woonie! ── hablo San, moviendo su mano de un lado a otro, llamando la atención del aludido que vio a su mejor amigo acercarse a Él con una gran sonrisa.

── San ── saludo sonriendo

Ambos jóvenes habían decidido ir a la plaza que les quedaba cerca para pasar el tiempo y probar los helados de la nueva heladería que recientemente había sido abierta.

Cuando el castaño llego junto a su amigo, emprendió su camino al local mientras charlaban de cualquier cosa, algunas veces riendo.

Al llegar se acercaron a la chica que atedia de cabellos rojizos quien mascaba chicle, parecía desinteresada en su trabajo pues su mirada lucia cansada, pidieron los helados que comerían y se dirigieron a una mesa vacía dentro del lugar.

Algunas veces se quedaban en silencio, pues ambos comían de sus helados y en otras sacaban algún tema de platica.

── Por cierto ── comenzó San, mientras le daba otra lamida a su helado ── Seonghwa me invito a una fiesta de su amigo Jeno así que quería saber si quisieras ir conmigo ── dejo de comer para mirar al castaño

── No lo se ── hizo una mueca ── sabes que no bebo y a ninguno nos ir a fiestas ── dijo, tratando de excusarse.

── Ya se, tonto ── rodeo los ojos divertido ── no te voy a pedir que bebas, porque ni siquiera es obligatorio pero podemos intentar algo nuevo ── se encogió de hombros y mordió la galleta del helado.

Wooyoung hizo una mueca, no estaba seguro si fuese buena idea.

── De acuerdo.

San sonrió y le agradeció.


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Esa misma noche, un amigo de Seonghwa los había llevado hasta la casa de Jeno, San no recordaba el nombre del chico pero lo había visto antes, pues a veces iba con ellos en el recreo charlar un poco con el azabache.

El camino a la casa de Jeno, fue algo largo, sin embargo hablaron un poco y ni siquiera se dieron cuenta del trayecto a su destino.

Al llegar, todos bajaron de la furgoneta, y notaron que el realidad no era una gran fiesta, no se escuchaba la música tan alto y no había gente fuera de la casa, supusieron que el dueño había invitado solo a algunos amigos.

Entraron y no se equivocaron, pues en realidad no había mucha gente.

San y Wooyoung no conocían a muchas personas de ahí en realidad, por lo que decidieron que se quedarían juntos.

Ambos amigos se dirigieron a la cocina a robar un poco de comida y algo de tomar, incluso se quedaron ahí un largo rato hasta que Seonghwa les hablo.

Se habían reunido todos en la sala de estar, estaban sentados formando un circulo.

── ¿Tenemos que quedarnos aquí? ── susurro Wooyoung a su pelinegro amigo.

── Juguemos un rato ── contesto mirando al menor, este le dio una mirada asesina pero acepto.

Estaban jugando la botella.

Dio incontables vueltas, tenia que cumplir el reto o debías tomar un shot. Wooyoung había perdido la cuenta de cuantos llevaba.

── Podemos irnos si quieres ── sugirió San, hablándole al oído.

── Estoy bien ── mintió, pues la cabeza comenzaba a darle vueltas pero no importaba.

Choi asintió no muy convencido.

La botella giro una vez mas, posándose en dirección al castaño

── Wooyoung ── comenzó Jaemin ── ¿Quién te gusta?

El aludido miro a los presente, quieres estaban expectantes, ansiosos incluso.

Agarro la botella, sirvió en el pequeño vaso y tomo de este, los demás chicos estaban decepcionados pero no dijeron nada y siguieron jugando.

Se sentaron de cosas que no sabían o que no esperaban que hicieran.

Y al cabo de un rato, fue turno de San.

── Besa a Wooyoung ── soltó Mingi maquiavélico.

Los chicos posaron su miradas en el pelinegro, quien miro a Song, dándole una mirada asesina.

Entonces, sin dudarlo, San tomo a Wooyoung girando su cabeza un poco en dirección al mayor y estampo sus labios en los contrarios.

Jung al principio no le correspondió el beso, pues estaba en shock, jamás se habían besado frente a alguien mas y el hecho de que los estuvieses viendo le daba vergüenza, sin embargo, al poco rato le siguió el beso, provocando chasquidos.

Habían olvidado que no se encontraban solo, hasta que Seonghwa los detuvo.

Los jóvenes se separaron a regañadientes, ambos con los labios hinchados y siguieron jugando.


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── ¿Qué somos? —pregunto Wooyoung de repente en un susurro, sin dejar de ver al techo.

Después de la fiesta de Jeno, ambos amigos se encontraban en la habitación del menor, habían regresado en la furgoneta del amigo de Seonghwa, San supo que se nombre era Mark, primo del peli plateado.

La pregunta seguía en la cabeza del pelinegro, quien aun no comprendía la razón de esta.

── Amigos ── hablo un San desconcertado después de una larga pausa, también susurrando.

Wooyoung hizo un puchero y agradeció mentalmente no pudiese verlo debido a la oscuridad.

── ¿En serio? ── lo miro por un momento antes de proceder ── ¿Seguimos siendo amigos a pesar de que hemos estado besándonos?

San solo se mantuvo en silencio, las palabras no salían de su boca, y ni siquiera sabia que respuesta darle a eso porque era cierto, ¿seguían siendo amigos a pesar de lo que hacían? el castaño no lo sabia.

── Maldita sea, San ── dijo Wooyoung al ver que no había respuesta por parte del aludido, se paro de su lugar y se sentó en el regazo del mayor quien lo miraba sorprendido ── No había besado a ningún chico, si pero no lo hice solo por eso, San, quise besarte porque me gustas ── el pelinegro abrió aun mas los ojos ── Y no se en que momento comencé a tener este sentimiento por ti, solo de pronto mi corazón se aceleraba cada vez que esta cerca de ti, cada vez que me decías esas cosas lindas o aquella vez que pusiste la película a pesar de que no te gustaba solo por mi.

San se había quedado sin palabras, ¿debía decirle algo?, ¿Qué tipo de confesión era esta?, el estaba ebrio, ¿y si era una broma? no, definitivamente no lo era, dicen que los borrachos y los niños siempre dicen la verdad.

Mierda, San esta confundido, necesitaba tiempo para pensarlo. 

── Lo siento, Woonnie ── contesto el pelinegro algunos minutos después ── No se que siento por ti, así que dame tiempo y en cuento lo sepa, te lo hare saber, te lo prometo ── hablo firme.

Hubo un gran silencio después de eso, algo largo incluso, el mayor no supo en que momento, sin embargo, noto que el castaño se encontraba apoyando su cabeza en su pecho aun sobre el, se había quedado dormido así que solo rio leve, jugo un poco con su cabello y deposito un pequeño beso en este.

── Descansa, Woonnie, ha sido un largo día para ambos ──


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Kiss Me « WooSanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora