hyunjin tomó una toalla y comenzó a secarse otra vez, tenía la mente en blanco y la mirada algo perdida.
¿qué debía hacer?
no planeaba quedarse mucho tiempo con el lindo rubio aunque en el fondo sienta que era todo lo que quería. temía que lo echase de allí y lo deje solo nuevamente.
— ¿hyunjin-ah?
tres golpecitos rápidos resonaron dentro del baño sacando al coreano de sus pensamientos.
— pasa si quieres. — contestó acomodando nuevamente la toalla en su cadera, tomando otra para seguir secándose.
felix se armó de valor y abrió la puerta con su mano libre ya que con la otra sostenía las tres prendas dobladas.
el vapor golpeó directamente en su sistema cuando se adentró en el húmedo lugar, percibió casi al instante el aroma a coco que había allí y sin embobarse más se acercó a hyunjin para dejarle al lado la ropa.
— ten, creo que te quedarán.
— está bien, gracias otra vez. — agradeció avergonzado mientras palmeaba por inercia la cabeza de felix.
— no es nada.. — murmuró cerrando levemente sus ojos, de alguna forma se tranquilizaba cuando le hacían caricias en el cabello justo como los perritos.
hyunjin tal vez, sólo tal vez, lo había notado y por eso siguió acariciándolo.
✿
lee se subió a la mesada para alcanzar cómodamente dos tazas que había guardado en el fondo de la alacena y también agarrar un par de velas que estaban sobre ésta.
— ¿necesitas ayuda?
felix casi se cae del susto.
— ¡hyunjin! — regañó con una mano en su pecho mientras sostenía fuertemente las velas con la otra, bajando de un saltito al suelo. — l-lo siento, no estoy acostumbrado.. a estar con alguien.
hwang se acercó negando con la cabeza, y tragandose la risa, hacia el más bajito diciéndole que no importaba.
— ¿qué quieres para tomar? — preguntó felix mientras enjuagaba las tacitas, eran algo pequeñas y de color negro con rayas blancas. — tengo té, café, chocolate..
— lo que tú tomes. — sonrió levemente, apoyándose contra la mesada. — ¿cuántos años tienes?
— veinte, en unos meses cumpliré veintiuno, ¿tú?
— veintiuno, los cumplí en marzo.
felix asintió tranquilamente, sintiéndose aún más cómodo. ambos tenían prácticamente la misma edad.
— ¿puedo..? — el rubio dudó un poco, queriendo distraerse mientras secaba las tazas. — ¿qué hacías allí afuera?
hyunjin borró su sonrisa.
ladeó su cabeza y buscó en su mente las palabras adecuadas para dar una explicación algo coherente del por qué había estado bajo la lluvia.
— no encontraba a mi perrito y no.. prefería estar afuera. — dijo seco. — en verdad agradezco que me hayas ayudado y dejado estar aquí.. cuando la tormenta se vaya me iré.
lee asintió algo desconforme y desvió la vista hacia la pava para ponerle agua, entre eso, se animó a hacerle una última pregunta a hyunjin.
— y.. ¿vives solo con tu perrito?
hyunjin bufó.
— no pero he vivido solo como por cuatro años hasta que tuve que regresar por kkami — explicó viendo cada cosa que hacía el menor. —, así se llama, está un poco enfermo así que..
— solo aquí pueden curarlo. — completó felix encendiendo la ornalla. — yo vivo solo o algo así desde los dieciséis, tenía un roomie pero se fué hace más de un año y perdimos contacto..
— ¿lo extrañas?
— a veces pero no mucho porque está con su familia, supongo.
felix se encogió de hombros y siguió con lo suyo, o al menos eso quería hacer, pero tras asustarse por un rayo, la luz se fué y él quedó congelado.
era un pésimo momento para tenerle miedo a la oscuridad.
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✮: love me, I don't want to go home 𖤐 hyunlix
Romantizmentre el fuerte diluvio y el leve olor a humedad, hyunjin se abrazaba a sí mismo, temblando un poco por el impacto seco y frío de la lluvia en su cuerpo. estaba perdido y necesitaba orientarse antes de desmayarse. aunque agradeció haberlo hecho. hyu...