𝐉𝐮𝐬𝐭 𝐓𝐡𝐢𝐬 𝐎𝐧𝐜𝐞 || 𝙶𝚊𝚛𝚢𝚌𝚊𝚝𝚘[Final Space alternative timeline]

3- el rocanrol de los idiotas

Yo no tenía ganas de reír, Tú reías para no llorar,

Yo le guiñaba un ojo a mi nariz, Tú consolabas a tu soledad,

Yo sin ninguna escoba que vender, Tú con mil y una noches que olvidar,

A mí no me quería una mujer, A ti se te moría una ciudad.

[...]

Avocato sí que había tenido un día de mierda. Papeleo innecesario, oficiales más ineptos que el sistema de salud, ninguna chance de salir de ahí para buscar a su hijo. Un día más infernal que los habituales con la bola de imbéciles del cuartel. Al menos, para variar, el rubio que llevaba tiempo mirándolo desde una esquina finalmente se había acercado a hablarle. Había pensado que era un informante al inicio, pero le bastaron menos de dos minutos de charla para notar que no tendría las neuronas funcionales para ser un espía. Era lindo, sí. Sería más bonito si no hablara tanto, pero no se puede tener todo en esta vida.

Era de la guardia, como decían. Y sabía algo del Final Space... era perfecto. Quizás le daría alguna pista. Lo que sea para avanzar su búsqueda.

Valiente de su parte, asumir que Gary pensaba las cosas cuando estaba ebrio. Inhaló profundo, contó hasta cinco y enfrentó a la pavada más grande que había escuchado desde cadete.

- Gary, con todo respeto, ¿que puta mierda acabas de decir?

- es real hombre, lo juro. - El chico pasó una mano por su hombro, mientras con la otra aún sostenía su vaso. - lo vi con mis propios ojos, quise tocarlo... pero luego algo me lo impidió... que... no recuerdo...

Tanto misterio por nada, pensó. Pero de todos modos, creer que un borracho le diría algo útil también lo hacía un idiota, aunque no le quite el enojo.

Dejó su vaso con fuerza sobre la barra y acercó su rostro peligrosamente al de su contrario.

- voy a golpearte tan fuerte que tendrán que sacar tu adn para identificarte.

- nah, no lo harás

No, no lo haría. No era tan idiota y de todos modos, al tipo ya lo había golpeado Quinn, que él lo repita no arreglaría nada. Era divertido provocarlo, de cualquier modo.

- pruébame.

- soy demasiado apuesto para golpearme.

- pfft. - hizo una mueca de burla. Tenía un punto, pero no iba a admitirlo. - he visto mejores.

- admítelo. - para estar enfrentando una muerte segura, Gary tenía agallas; vació de un trago lo último que quedaba en su vaso, y apuntó con un dedo al uniformado pecho del ventrexiano. - no puedes conmigo, señor gato.

- ...

La mente de Avocato era un caos en ese momento. de verdad quería golpearlo, pero por otro lado, lo admita o no era difícil estar enojado con un ser así de irritante. y tenía que reconocer que tenía razón, realmente necesitaba compañía. Evitar socializar había comenzado como un mecanismo de defensa, pero se había vuelto un mal hábito del que llevaba años sin salir. Ni siquiera conocía a sus vecinos de piso.

Gary, evidentemente, no tenía idea de nada de eso. En su estado de media ebriedad, tomó el silencio de él como una afirmación para seguir.

- ¿realmente no vas a negarlo, eh?

Avocato siguió sin contestar. se levantó, pagó su cuenta y se dirigió a la salida, no sin antes dedicarle una sonrisa al insistente rubio. Al pasar junto a él, se detuvo a murmurarle; sabía que solo necesitaba un último empujón para tenerlo donde quería.