𝐉𝐮𝐬𝐭 𝐓𝐡𝐢𝐬 𝐎𝐧𝐜𝐞 || 𝙶𝚊𝚛𝚢𝚌𝚊𝚝𝚘[Final Space alternative timeline]

4- this ain't a scene, is an arms race

And i don't really care wich side wins,

As long as the room keep singing; that's just the business i'm in

this ain't a scene, is a goddamn arms race

i'm not a shoulder to cry on, but i digressi'm a leading man, and the lies i wave are oh, so intricateOh, so intricate

[...]

El dolor de cuello solo significaba dos cosas; se estaba volviendo viejo, y se había quedado dormido sobre la mesa de nuevo. Gary bostezó, levantando la cabeza de encima de las cartas desparramadas por la mesa.

Oh. Las cartas.

Entonces realmente ocurrió.

Frente a él solo estaba un asiento vacío; la chaqueta de avocato colgaba de esta. Oyó un ruido desde la cocina, y por la puerta abierta visualizó al ventrexiano de espaldas, con la cabeza metida en el refrigerador.

- Gary.

Oyó su nombre y su ordenador mental empezó a encender lentamente; se levantó de su silla y obtuvo una mejor vista del ventrexiano. En su puesto junto al microondas, Avocato se estiraba alcanzando ángulos sobrehumanos.

- ese es mi nombre, sí. Se oye bien cuando lo dices.

Parpadeó lentamente. ¿cuánto se había dormido? probablemente menos de media hora.

- Gary, son las 7 am.

Bueno, una hora y media entonces.

- todavía es de madrugada. Dame cinco en lo que el techo deja de dar vueltas.

Volvió a sentarse, esta vez en el lugar de Avocato. Su cabeza le estaba dando la paliza de su vida por el alcohol de la noche anterior, que ya no parecía tan buena idea como antes. Ni siquiera había funcionado del todo; Avocato y él solo hablaron y jugaron cartas por horas, no pasaron de eso.

Compañía, al menos. Gary ya había perdido la cuenta de la última vez que tuvo alguna visita; quizás algún viejo amigo de la academia, algún compañero de trabajo de paso, pero nunca eran muy prolongadas. Hundió su rostro en el abrigo colgado por el respaldo, asimilando los hechos. ¿podia considerar a Avocato su amigo?

- ...que no sabías beber.

Ah, le estaba hablando. El ventrexiano sonaba burlesco; era obvio que disfrutaba la situación y que le estaba regañando por su desastre la noche anterior.

- te advertí que no sabías jugar. - Gary se quejó, levantando débilmente la cabeza- ¿cuántas veces te gané?

- siete rondas tú, cinco yo, cinco empates.  - Avocato finalmente vino junto a él, llevando dos tazas en una mano y una bolsa de galletas en la otra. Gary regresó a su asiento con prisa. Avocato le pasó una de las tazas; no era el café que Gary tomaba todas las mañanas, era leche, aún humeante.

- leche y galletas, de regreso a mi infancia - murmuró con sorna.

Avocato tomó un sorbo de su taza, con una mirada que claramente decía y mira quién lo dice.

- tienes como diez tipos de galletas en tu alacena, habla por tí. Además, no creo que la cafeína sea buena idea luego de anoche. 

- Culpable. - Gary soltó una pequeña risa, y podría jurar que Avocato esbozó una sonrisa al verlo.