Capitulo 56

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Salgo a tomar aire a la terraza sintiéndome sin oxígeno adentro

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Salgo a tomar aire a la terraza sintiéndome sin oxígeno adentro. En cuanto el aire fresco llega a mis pulmones me permite respirar más tranquila, aúnque el nerviosismo sigue en mí.

Intento procesar y enumerar las cosas en mi cabeza. Matías Black, mi exnovio mafioso con el cual tuvimos una relación intensa está allá adentro, está con su familia entre ella su esposa Irina, hermana del hombre que me secuestro cuando tenía diecinueve años, también se encuentra el hijo de ese hombre sin contar que la hija de Matías e Irina es la novia de mi hijo.

- ¡Mierda! - grito frustrada

Esto no me huele nada bien. Siempre que Matías está cerca es igual a desastre y muerte, pero ¿Como le digo a mi hijo que puede estar en riesgo por el pasado de su madre? ¿Que puede estar en riesgo por la chica que se enamoró?

Definitivamente no quiero a mi hijo envuelto en el ambiente de la mafia, no quiero que sufra lo mismo que yo. No quiero que para el recibir balas sea algo cotidiano, pero no quiero que se rompa su corazón.

- ¿Señora Isidora? ¿Se encuentra bien? - Levantó mi cabeza encontrándome con Aidan y no puedo evitar que las imágenes de lo que sufrí con su padre vengan a mi cabeza lo que hace que cierre fuerte mis ojos - Se que le recuerdo a él y lo siento por lo que la hizo pasar, pero yo no soy como el

- Lo sé, lo siento es que... Eres igual a él

- Yo lo odio al igual que usted. Mamá fue otra víctima de él y no se imagina cuanto odiaba mirarme al espejo cada vez que ella me recordaba que me parecía a él - Lo miró a los ojos y puedo ver en ellos que es sincero, puedo ver cuánto le atormentan esos recuerdos - Mamá solo tenía las características físicas indicadas para que el dejara dar rienda a su obsesión - de su billetera saca una imagen la cual me extiende - Esa era ella a los dieciséis años

En la imagen se ve a una chica casi de mi tamaño, delgada, con su cabello ondulado rubio, de facciones delicadas y ojos claros con una sonrisa, lleva lentes gruesos y vestida con un sueter ancho.

- Siempre le reprochó que no tenía el color de ojos exactos - continúa - y que su carácter era más dócil. Ella estudiaba y de vez en cuando trabajaba en una cafetería, ahí la conoció. Ella era callada, vergonzosa e insegura. Cuando lo conoció sintió que era una suerte que un chico guapo como el mostrara interés por ella y comenzaron a salir, él le mostró su vida e intentó incluirla en ella, pero mamá era demasiado miedosa para eso, ese fue su primer fallo. Luego la cambio hasta el punto de no parecer ella, si no una persona completamente diferente - me extiende otra foto donde está la misma chica pero con su cabello lacio, un bralet negro, Jeans de cuero del mismo color y una chaqueta palo rosa, sus lentes desaparecieron y fueron reemplazados por lentes de contacto azules - Busco que se pareciera a ti, esa ropa era suya.

- No puede ser - digo intentando de procesar lo que me esta diciendo

- Estuvieron así por algún tiempo y luego empezaron los golpes y a evitar que saliera, probablemente porque todo su círculo te conocía y le advertirían al señor Matías de su obsesión. Luego mamá quedó embarazada de mí, en ese momento ya casi no sabía de él, lo veía de vez en cuanto, pero lo suficiente para saber que estaba perdiendo la razón. Hasta que un día la echo de su casa con todas sus cosas. Cuando se enteró que la mafia Black y Presley se habían enfrentado supo el porqué. Había conseguido a la real. Me crio sola a mí, sin la ayuda de nadie, pero a pesar de todo me crio con amor y me enseñó a amar al prójimo y que el odio solo lastima a las personas. Nunca quiso que tuviera que ver con la familia de él, pero cuando ella murió hace unos meses y quedé solo... Quise conocerla

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