01 "Decisiones"

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LEAN PORFIS

Hola amores, recuerden que la novela no está corregida y soy humana, lo que quiere decir que encontrarán alguno que otro error.

Les recuerdo que una vez terminada, corregiré TODA la novela. Y capaz vean cambios, si la releen.
Es la primera vez que narro de esta forma, pero tenía que hacerlo para desarrollar mejor la historia.

Sin más, espero que les guste.

...
22 años después del primer infectado.

Los pasos de los habitantes resonaban en el pasillo, aún así ella parecía no escuchar nada. Seguia enfocada en ganar las elecciones, pues con 19 años era la única chica capaz de presentarse contra mujeres más desarrolladas mental u físicamente. Aún así la mirada potente y la espalda recta le daban un aire de superioridad. El cabello atado en una cola alta y la vestimenta la hacían ver digna.

Las demás personas la miraban confusas, pero ella solo estaba enfocada en sí misma. Su mente recreaba los escenarios en los que se había visto preparada, por su padre, para este momento. Pues el era el presidente de la ciudad y ahora necesitaría una presidenta. Ella quería ser la presidenta.

Desde que era niña su padre la preparo para marcar la diferencia, el quería que ella fuese existosa. Incluso en el momento en el que se encontraban.

—No creo que pueda ser presidenta, ni siquiera conoce los sectores de ataque— de repente captó las palabras y miro a su derecha.

—No se trata de conocer y caminar por esos valles, Señora. Se trata de ser capaz y tomar las decisiones que la mantienen aquí. No me votan por conocer los caminos, lo harán porque sabrán que puedo mantenerlos bien y vivos.

Ainoa se preparó para recibir y responder cada comentario hacia ella. Pues nadie la creía capaz, pero por suerte tenía la labia que se necesitaba. Aunque también tenía suerte de que su padre, aparte de ser el presidente, era quien había desarrollado la vacuna contra el -Covid-19 y quién traía tanta seguridad a su ciudad.

Vio que muchos se detenían mientras por los megafonos se avisaba que las elecciones ya habían concluido. Entonces ella sonrió, sabía que ganaría y lo demostró levantándose, mientras se repasaba la falda con las manos y miraba a sus compañeras—si así podía llamarlas— dedicándoles un asentimiento.

Camino hasta salir del edificio central, varias miradas recayeron sobre ella y solo sonrió. Paso días imaginado esto, cada día sonreía al espejo visualizando su sueño. Sueño que estaba por cumplirse.

Los aplausos no se hicieron esperar, pues todos sabían que ella era la elegida. Su nombre se escuchaba en cada rincón de la ciudad, ella sabía que probablemente su padre había comprado a unos cuántos ciudadanos y eso la hacia molestar.

Sus amigos se acercaron abrazándola, pero aún así ella sentía un vacío en el pecho. Alejandro, su novio, había fallecido semanas antes, ya que la dosis de la vacuna contra la enfermedad fue aplicada demasiado tarde. Cómo siempre lo disimulo bastante bien, sonriendo y agradeciendo a quienes le dieron su voto.

Quería creer que había llegado sola, en parte sabía que si. Pues en parte se había ganado el respeto de cada persona, entrenada cómo guerrera desde los 11 y educada para ser presidenta desde que tenía 6.

Estuvo alrededor de una o dos horas agradeciendo, hasta que finalmente se anunció que ella era la nueva presidenta. No había visto a su padre y aunque por dentro estaba demasiado nerviosa, no lo demostraba.

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