El amor que había se apago
sus lagrimas rodaron
otra vez le fallaron
y a su soledad le construyo un campo.
Entre el pastizal
decidió salir a llorar
la lluvia comenzó a resonar
y todo comenzó a terminar.
El campo triste fue feliz
y se acabo en un desliz
no hay nada que ordeñar
ni cosas para cosechar
solo muchas cosas que lamentar.
-a.m-