Un chico de lentes se levantó de su cama emocionado, tomó una hoja de papel y empezó a escribir una pequeña frase:
"Estas listo? ARRIBA DORMILÓN!"
Dobló la carta hasta hacer un perrito de papel, bueno su tío era Imperio Japonés... uno tiene que aprovechar ser sobrino de él no? con dificultad se fue a la ventana y se subió en esta, tomo una cubeta de metal y puso ahí el perrito, amarró la cubeta a un listón que este estaba atado de otro lado del edificio, y aventó la cubeta y con una palanca la iba rodando hasta que se dio cuenta que llegó chocando ligeramente en la otra ventana, se asomó bien y vio como su hermano menor se estaba poniendo el chaleco con dificultad, ya cuando sacó su cabeza vio la cubeta y miró hacia arriba.
Alam saludo desde arriba, Ale solo lo imito y abrió la ventana sacó el papelito y se fue corriendo a su escritorio y empezó a dibujar el perrito, Alam ya sabía que iba hacer eso así que rápidamente se dio media vuelta para abrir la grande puerta.
Ale cuando terminó de dibujar el perrito de papel, lo deshizo y vio el mensaje este solo sonrio, y salio corriendo a su puerta se puso su gorro inglés que tanto amaba, aunque su padre estuviera en desacuerdo con este objeto, abrió la puerta y se dirigió a las escaleras de arriba, dio un giro en la esquina hacia la izquierda y empezó a subir por las escaleras de tapete color carmín, pero se tuvo que tropezar ya que chocó con su hermano quien se había tropezado por haber querido bajar rapido.
-INUTIL! ME TIRASTE!- quejo Alam.
-NO! TU ERES ESTUPIDO POR HABERTE CAÍDO!- se burló Ale.
- bueno ya ya somos los dos unos cabezas huecas, pero no grites que papá se puede despertar- dijo Alam mientras le manoseaba la cara tratando de taparle la boca.
-oi oi tengo planeado pedirle ayuda a Italia.- rio Ale
-Al niño pizzas? no no prefiero comer la comida que nos hace papá que volver a comer espagueti o pizza- quejo Alam mostrando una cara de asco al recordar como la vez pasada le hizo daño la lasaña, y se puso casi de color verde el pobre- asi que emmm que tal si vamos aya abajo y vemos un ratito el libro de cocina de nuestro abuelo he?
Ale solo se quedó pensando, que él recuerde no es bueno cocinando y puede que quemen la cocina así como le quisieron hacer un pastel a URSS en su cumpleaños... bueno eso fue por que invitó a sus hijos, si ahora solo estan ellos dos, no cree que fuera tan dificil- ... esta bien, pero si se rompe o quemamos algo ya sabes a quien le echaré la culpa- se cruzó de brazos dirigiéndose a la persona a la que en un futuro posible le echaria la culpa.
-Ahg esta bien, pero si me vas a echar a mi la culpa por lo menos sigue mis indicaciones y ya puedes decir que te obligue- dijo así Alam ladeando un poco la cabeza en muestra de pereza.
-Oye que seas mayor por 10 segundos no te da de...-<<callate si no lo empeoras>> fue lo que se pensó a sí mismo- bueno si ya ya bajemos que no tenemos mucho tiempo.
Los dos bajaron apurados las escaleras y solo pasaban de puntillas cuando pasaban al lado de una habitación, no tardaron más de 5 minutos en bajar a la cocina con los sirvientes de la mansión, cuando llegaron todos voltearon y saludaron a los hijos del amo de la casa, con suma cortesía.
-Hola pequeños, que se les ofrece hoy de desayunar?- dijo la mucama favorita de Ale conocida como Hanna, despeinando los cabellos a este.
-No Hanna, hoy queremos pedirles ayuda a ustedes con la comida de nuestro padre- sonrió emocionado Ale.
-Y nos preguntamos, que si nos pueden prestar el libro de cocina de nuestro abuelo.- dijo apoyando la idea de Alam.
Hanna solo asintió con la cabeza, ¡Manos a la obra!, pasaban página por página, hasta que se toparon con una hermosa imagen con colores llamativos para los gemelos, ¿qué colores preguntaran? el lindo color de la frambuesa, la fresa, ese hermoso color carmín o color rojo de la mezcla de estas dos frutas, era hermoso.
-Este!- gritaron los dos- Esto queremos hacerle a nuestro padre!!- a veces uno diría que daban miedo que hablasen al mismo tiempo pero ahora era todo lo contrario, se veían tan tiernos con sus caritas de súplicas, Hanna solo asintió, ¿quien se podía resistir? mis respetos si esas caritas tan tiernas de estos gemelos no te hacen ningún efecto en ti.
Leche derramada, vainilla tirada, azúcar en el piso, no pregunten pero tambien tenian harina en el cabello y en sus vestimentas, todo regado las risas de estos niños sonaba por toda la cocina, un ambiente de ensueños, risas por aquí risas por allá, pero finalmente con su hermoso platillo listo Rote grütze, ya estaba listo, sin pensarlo dos veces prepararon la presentación y claro de paso se comieron parte del helado de vainilla, intentaron sacudirse para quitarse la harina y se quitaron sus delantales pero, era imposible que no se notara la harina en cabello negro, haun asi Hanna hizo todo lo posible por que quedaran limpios.
Alam apuraba a su hermano y los dos con cuidado de todo el mundo intentaban que no se les cayera la barrita de comida-Ale no lo vayas a tirar.
-no soy lo demasiado torpe para arruinar esto- quejo un poco mostrándole la lengua a su contrario.
-tenemos como 16 años ya eres lo demasiado maduro para...
-corrección! tenemos 8 años countrys idiota, que no sabes contar?
-es lo mismo, además deja de pelear o si no ya no le podremos festejar a nuestro Váter.
Los dos chicos se fueron cuidadosamente con el helado, Hanna solo los vio emocionados... que lastima que esa felicidad la iba a ver terminar... pero Dios ella es Judía, si espera la libertad pero ... y la felicidad de esos dos niños? ¿Los futuros gobernantes? solo sabía que es el año 1944 ... y algo le decía que esto ya iba a acabar.
Los chicos ya estaban en la puerta de su padre, que extraño ya era tarde y su padre todavía no se levantaba...
-creo que ayer trabajó mucho no crees Alam?-opino un poco preocupado Ale
- no lo creo él no se cansa asi de fácil- opino orgulloso y erguido listo para abrir la puerta pero cuando toco la manija y abrió se pudo escuchar a su padre toser-...
Los dos chicos no tuvieron opción ya todo estaba preparado asi que los dos contaron en silencio - 1, 2,...3!! ¡FELIZ DIA PADRE! -Gritaron los dos emocionados, intentando enmascarar su preocupación por el aspecto de su padre.
-ja? niños, no tenían que molestarse- les mostró una cara dulce de agradecimiento- y... que tiene hai ha?
-ho ho!! es una sorpresa!! no se vale ver!!- frunció el ceño Ale con una sonrisa de amenaza pequeñita.
-si si Ale tiene razón!-Alam corrió con su padre y se quitó la corbata y se la amarró en los ojos- cuando contemos tres te la quitas, de acuerdo?
-... niños que dijimos sobre vendar a mi los ojos?- sonrió un poco molesto.
- Papá!! no está el señor URSS aquí!! tampoco volvimos a tocar las armas del escondite! esto es una broma de niños!!- abogo un poco Ale para que no engañaran a Alam
- de acuerdo, de acuerdo, ustedes diganme cuando.
Ale puso la bandeja enfrente de su padre mientras veian como el mayor intentaba no toser, los dos ya con una mueca un poco desanimados sacaron cada uno sus cartas, y alfin contaron hasta tres, su padre se quitó la corbata y vio la gran sorpresa mañanera ese hermoso helado y dos cartas cada una con los nombres de los niños- Aww gracias niños no tenían que *cof* molestarse... y veo que es de vainilla el helado- Reich no pudo más y lo probó... ese hermoso helado, el sabor, le hizo traer el recuerdo de cuando cocinaba con su padre... y él como a los dos les gustaba hacer justamente este plato causandole que llorara un poco; este acto hizo asustar a los menores atacando de preguntas, a las que solo a todas decía- no se preocupen niños estoy bien, es más me da gusto que le atinaron a mi postre favorito- dijo guiñando así un ojo, causándole emoción a los niños- pero y esas cartas?- señaló dichos objetos.
-hou estas cartas las hicimos para que cuando te sientas solo y te sientas perdido las abras, por ahora no creo que la puedas abrir hoy ya que estas con nosotros, es cuando te siente frustrado aya en el cuartel y nos extrañes vater- sonrio asi Alam.
La linda familia se veía en ese cuarto vieron que su padre estaba enfermo asi que, solo por ese dia todo el dia se la pasaron en la cama a veces traían chocolate caliente al cuarto o café para el mayor y calentarlos.
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Solo te queria decir... ¡FELIZ DIA PAPÁ!
Random... que puedo decir? en cada pais festejan diferente ese día especial no? lastima que algunos odian... y otros olvida... esta linda festividad para los padres de esta historia