Jennie: Mi amor es como una vela
Rosé: Oww, ¿es por qué con él iluminas mi vida?
Jennie: Nop
Rosé: ¿Entonces...?
Jennie: Olvídate de mí y soy capaz de quemar tu casa
Rosé: (asintiendo lentamente) Empiezo a sospechar que el que mi anterior departamento se incendiara cuando fui a Australia no fue un accidente, ¿o si?
Jennie: (levantándose) Bueno, con tu permiso, es momento de ir a trabajar
Rosé: ¡Jennie!
Jennie: En mi defensa, me dejaste sola mucho tiempo, demasiado como para provocar un incendio
Rosé: ¡Pero fui a trabajar!
Jennie: ¿Me llevaste contigo? No. Entonces no puedes regañarme