[En una reunión familiar]
Rosé: Dejen de preguntarme por Jennie. ¡Ya les dije que es mi ex-novia! Ya la superé
Jennie: (molesta) Puedes dejar de decir eso a cada rato. ¡Soy tu maldita ESPOSA, Roseanne!
Rosé: Y-Y como les iba diciendo, m-mi esposa es un encanto, ¿no creen?