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taehyung: 93 ; jungkook: --

-Por qué querías que te trajera a este lugar, papá?.-dijo la pelinegra mientras estacionaba el auto.

-Para despedirme, hija.

Bajo la atenta mirada de Jieun, Taehyung arreglaba su cabello canoso frente a lo que era el espejo retrovisor.

-Despedirte de quién?.

-De Jungkook.

La pelinegra le regaló una pequeña sonrisa conmovedora. Ella no podía creer como el amor de su padre podía perdurar por tantos años, se notaba a kilómetos el cariño y el amor tan puro que este le tenía y le sigue teniendo a aquel hombre llamado Jeon Jungkook.

Le tenía tanto amor que se arreglaba para él aunque no lo pudiese ver nunca, aunque no pudiese apreciar su belleza. Que a pesar de los años, Taehyung la seguía conservando intacta.

-Quiéres que te acompañe?.-preguntó con suavidad, no quería entremoterse mucho, pero tampoco quería que su padre tenga un ataque de tristeza.

-Esta bién, no es necesario.

Jieun vio como el hombre a su lado con mucho esfuerzo bajaba del auto con un ramo de flores en mano, para luego caminar y pasar por las puertas del cementerio.

El de pelo blanquesino caminaba por el camino de cemento contemplando con sus ojos las lápidas con flores de todas aquellas personas que no se hallaban en este mundo. Le parecía bastante triste el hecho de ver como muchas no tenían ninguna flor, como si los seres queridos de esa persona difunta no la amasen.

Y eso hizo que se pregunte a sí mismo, ¿si hubiera elegido a Jungkook, le hubieran puesto flores en su tumba? Probablemente no, pero eso no importaba ahora.

Taehyung siguió caminando por un largo rato hasta sentarse en un banco de cemento, ya que sus piernas le dolían un infierno, su edad ya le estaba rindiendo cuentas.

A este paso seguramente moriría de cansancio antes de encontrarse con el azabache.

El hombre un poco agitado aprovecho la vista que tenía, miró como las personas se encontraban arrodilladas frente a las lápidas llorando o hablando como si esa persona la escuchase, se veían tan ridículos, tan patéticos.

Como él ahora mismo, que no tenía ni la más mínima idea de donde se encontraba la tumba del azabache, pues en cuanto lo habían llamado para darle la noticia de que Jeon había muerto no quizo seguir escuchando ni un segundo más, por eso lo único que pudo rescatar de aquella charla fue en donde lo habían sepultado.

¿Quién le dijo de la muerte de Jungkook? Un compañero de la secundaria le dio la noticia la semana pasada.

Las palabras de Yugyeom fueron las siguientes:

"Dicen que murió de tristeza, pero nadie sabe la razón, ni siquiera su esposa."

"Lo van a sepultar en el cementerio de Seul mañana, sería lindo ir a despedirlo."

Pero él no estaba preparado, necesitaba tiempo para asumir que Jungkook ya no estaba en este mundo, que ya no estaba en el mismo suelo donde el pisaba. Por que para Taehyung, lo único que los unía era la luna, el sol, las estrellas y el suelo, pues por más lejos que estaban el uno del otro aquellos elementos los unían, junto con su amor.

Pasados unos minutos decidió levantarse del banco de cemento para seguir buscando la lápida de quien fue su primer amor, pero algo le llamo raramente la atención.

Había una mujer a unos metros de él, con unas rosas blancas en mano, iguales a las que Kim llevaba. Aquella mujer se encontraba frente a una lápida, que lastimosamente no llegaba a ver el nombre, pero como curioso que era decidió acercarce.

Mi caramelo • kookv Donde viven las historias. Descúbrelo ahora