N E O N - M A R K - PRT 2

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Las emociones encontradas se hicieron piedra al salir del carro, unos minutos de distancia entre mi puerta y la casa bastaron para nublar mi razón, sus manos tomaban con fuerza y posesión mi cuerpo, que se restregaba contra el suyo. La desesperación de obtener lo que en mucho tiempo nos negamos había tomado forma nublosa y se adentraba en nosotros, buscando y reclamando a niveles desconocidos.

Aventando todo a cada paso llegamos a mi habitación, arrojando mi cuerpo al piso en dirección a una alfombra, mis rodillas y manos fueron el soporte, mark desde atrás quito con fuerza y facilidad mi falda junto a la ropa interior, la humedad de mi vagina se escurría desde mi monte venus hasta el ano, sus dedos se barnizaron al hacer aquel recorrido que me elevaba la respiración.

-No sabes cuantas noches fantaseaba con esto, con sentir tu humedad empaparme completo, en hacerte estremecer y dejarte en un estado donde rogar sea poco-murmuró desabrochando sus pantalones y poniendo uno de sus pies sobre mi espalda, haciendo que mi cara se tocara con la acolchada alfombra y mi culo a su imaginación.

El ruido de su bragueta abierta y los elásticos de los boxers bajarse me provoco una palpitación en el clítoris, sus piernas un tanto flexionadas y sus manos en mis caderas lo impulsaron a entrar y sellar mi humedad, se sentía tan bien el ser llenada por ahí, ese lugar donde comienzan las cosquillas, esa zona sensibles e insaciable.

Mi respiración se agitaba, la piel me empezaba a sudar, su cadera y la fuerza de sus trabajadas piernas lo impulsan a por más, el sonido húmedo se acoplaba a mis jadeos, ¡Oh si! Ansiosa metí dos dedos a mi boca y los baje lentamente hasta que masajeaba mi clítoris, hinchado y expuesto, ¡Santa mierda!, mi juicio ya perdido se nubla más y al oírlo gemir una liga de cosquillas viaja desde adentro y se chocan en el lugar que presionan mis dedos.

Consumida por el ritmo que nos eleva, y Marck sabiendo que estoy pendiendo en el límite con su voz cargada de excitación y poco control exige:

-Ábrete sobre la cama...

Con las piernas temblando y el hormigueo por todo el vientre me levanto llegando a mi objetivo, me dejo caer de espalda y con el morbo en la mirada abro sin vergüenza las piernas ante el, dando una caricia lenta por mis pliegues húmedos y rojos antes de que su cuerpo ya luzca desnudo y su imponente figura varonil me cubra por encima.

Jadeo, los pulmones se extienden y arrebatan más aire del normal, sé que en esta posición su pene tibio y suave entra con más ferocidad y violencia en mí, y torturándome lo hace, con azotes se hunde en mí, una de sus manos se enrosca en mi cuello y la otra se hunde en las cobijas dando soporte a su fuerza y movimientos. La forma en que lo hace y sus gemidos me llenan, me sobrepasan y me dejo ir, el orgasmo me exprime primero, mis paredes femeninas lo aprietan y solo queda el empujar más adentro, mi fuerza perece y los espasmos me persiguen, su pene se inmoviliza y sé que ha llegado también.

Después de que la fiereza que nos provocó el orgasmo y deseo perece, caemos en cuenta de la realidad que nos envuelve, y por un momento en sus ojos me veo reflejada, veo que de nuevo volví a él, como siempre.

-Solo quedémonos aquí, acostados como cuando éramos esos adolecentes ingenuos que apenas se sabían besar...

Sonrió y me percato que no he dicho ni una sola palabra desde que salimos del bar.

-Solo que esta vez...

-¿Esta vez?..

-No me dejes de abrazar...

Sus ojos y boca me sonríen y acalorados nos envolvemos en una delgada sabana.

. . .

El cansancio lo domino y yo en la esquina de la cama lo contemplo como una hermosa obra de arte, nada cambia en tan poco tiempo, en su rostro y cuerpo no son visibles las fracturas que tenemos en común pero sé que le duele como a mi...

Su teléfono vibrando en el pantalón tirado en el piso me provoca curiosidad  y lo recojo.

La garganta se me seca y deseo no haber dejado a Yoon Gi en aquel lugar, las fotografías y los mensajes hablan solos y el agua salada parece darles respuesta...El dolor recorre mi garganta, pasa por el pecho donde me oprime los latidos del corazón y al final se acuna en mi estómago, sabiendo que una vez más por mi propia voluntad fui pisoteada me devasta y me revienta.

Recojo la ropa de ambos, salgo por el pasillo donde con silencio me visto ahogando cualquier sonido que me pueda delatar, y una vez fuera dejo toda la ropa de Marck en el bote de basura.

-¿Sigues con un casco de sobra?

-Y con muchas ganas de perderme entre sexo y alcohol.

-Min yoon Gi espera por mi, esta noche sigue pintando un color "Neon"


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⏰ Última actualización: Aug 19, 2021 ⏰

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