Empresario - YM

17

Narrador omnisciente

Rápidamente Seokjin quita la bolsa y pone el regalo encima de la cama matrimonial al que compartía junto con su alfa.

Una vez listo, como retoque final puso una carta en donde decía "ábrelo", sabía que Namjoon llegaba a las ocho de la noche, por lo cual, tenía el tiempo suficiente para bañarse y preparar la cena.

Busco la ropa necesaria y se adentro al baño, empezó a retirar su ropa lentamente, una vez completamente desnudo dentro de la ducha, se relajo con el agua tibia sobre sus cabellos.

Pasaron aproximadamente unos diez minutos en donde al fin salió de la ducha, con la toalla empezó a secar partes de su cuerpo y con secador secó su cabello.

Ya con la ropa puesta, se dispuso a salir del cuarto con una sonrisa, aunque esta no duró muchos segundos dado que poco a poco se fue desvaneciendo, Seokjin reconocía perfectamente el aroma a tierra húmeda y canela.

Ahí se encontraba su alfa, estaba inmóvil, sosteniendo la prenda de bebé y los zapatitos marrones.

- N-Nam. - el omega no pudo evitar tartamudear de los nervios que lo envolvían.

Namjoon levantó su mirada, conectándola con la de su lindo omega, sus ojos estaban algo brillantes.

- Vamos a ser.. - aclaró su garganta. - ¿Padres?

- Si. - fue lo único que pudo articular, mientras asentía con la cabeza.

Nam solo pudo sonreír de felicidad, se acercó a Jin con rapidez abrazándolo instantáneamente.

- No sabes cuánto te amo. - habló con lágrimas de felicidad cayendo por sus mejillas.

- Yo también te amo Nammie. - Seokjin al fin pudo respirar con tranquilidad, mientras se separaba un poco del abrazo. - Vamos a tener un hijo.

No pasó ni un segundo y ambos juntaron sus labios, al final de cuentas no todo salió mal.

El omega bajó las escaleras mientras sonreía feliz, la imagen todavía no se le iba de su cabeza.

Ya en el primer piso, se encaminó hacia la cocina para preparar la cena. Los minutos pasaban y la noche se iba acentúando. Una vez lista la cena, preparó la mesa para servir.

JiMin dispuesto a despertarlo, se dirigió a la habitación otra vez, ya estando al frente de ellos, intentó despertar a Yoongi, molestándolo un poco tocando su rostro, pero no ver ninguna reacción se rindió.

Minki se despertó al instante desorientado y con los cabellos desarreglados. En un susurro le mando a lavarse las manos para cenar, lo cual obedeció con rapidez.

Cuando Minki abandonó la habitación, JiMin recordó lo que Jin le ahbai mencionado en caso se encuentre en una situación donde Yoongi roca no quisiera despertar.

"Si algún día levantas a Yoongi y este no despierta, tocale el pezón"

Dispuesto a tocarle el pezón a Yoongi, este abrió los ojos al instante y en un solo movimiento tomó la cintura del omega y lo dejó recostado en la cama, quedando el alfa encima suyo.

- ¿A dónde iba esa mano traviesa? - habló cerca de su oído con su voz algo ronca, quizás porque recién se habia despertado.

- Y-yo. - tartamudeo tratando de pensar en algo pero simplemente estaba en blanco su mente.

- Te apuesto que Seokjin te lo dijo. - mencionó con voz sarcástica.

JiMin sorprendido por aquellas palabras, abrió sus ojos más de lo normal, pero antes de que afirmara lo dicho por Yoongi, sus labios chocaron, el omega trato de separarse pero al ver que el alfa no se iba a separar solo cerró sus ojos y se dejó llevar.

Sus labios se empezaron a mover lentamente disfrutando el momento, mientras más pasaban los segundos, el beso se iba tornando algo brusco, abrió un poco boca, dándole acceso a Yoongi.

Sus aromas se empezaron a mezclar, dándole un toque dulce y algo excitante.

Cuando se separaron JiMin sólo un fuerte jadeo, respirando agitada mente, ambos se miraron a los ojos, aunque la siguiente frase dejó congelado al omega.

- Déjame cortejarte. - soltó de la nada Yoongi.

Gracias por las personitas que leen, votan y comentan. Muchos besos.

Angela ✨