Mi Perdición II Parte De Un Nuevo Comienzo

Capítulo 44

Mi madre me mira puedo ver en sus ojos el terror que tuvo que pasar, pero no puedo más necesito saber si estábamos en peligro mientras que el hombre está en la calle tan normal.

-Todo paso muy rápido estaba preparando las cosas para hacer unas galletas al horno cuando escuche un ruido, al principio pensé que era tu padre, pero luego un hombre entro por la parte de atrás de la casa, pelee con él, pero saco una navaja que tenía y ahí fue cuando paso lo demás, no sé cuánto tiempo pase tirada en el suelo no tenía el móvil en la cocina, tu fuiste mi salvación mi amor si no fuera por ti no estaría aquí contigo

Las lágrimas vuelven a mi cuando mi madre me termina por contar, me aferró a ella abrazándola aunque tengo cuidado de no hacerla daño.

- Lo siento tanto por no haber estado contigo mamá – la digo sintiéndome culpable por no haber estado con ella cuando más me necesitaba.

Mi madre levanta su mano acariciando mi mejilla mostrándome su sonrisa de siempre que me tranquiliza.

-No es tu culpa de lo que paso, te estás haciendo mayor mi amor y empiezas a hacer tu vida – cojo su mano para dejar un beso sobre ella.

-¿Sabes quién es el que te ataco? ¿Le conoces de algo? - la pregunto con delicadeza, pero a la vez demostrándola que quiero saber más.

-¿Dónde está tu padre? - me cambia de tema por completo, la observo viendo en sus ojos que ella sí que sabe, pero no quiere decirme nada.

-Está poniendo la denuncia, pero no intentes cambiar de tema mama esto es serio, ¿le conocías? Porque si es así podemos ir a decírselo a la policía para que le detengan ya – si ella lo sabe no hay tiempo que perder.

-No es tan fácil Sofía, si se quién es la persona, pero es sumamente peligroso no es una persona normal hay que andar con cuidado – cada vez que hablaba me sentía aún más confundida que antes.

-Te intento matar mama, ¿acaso esperar a que lo vuelva a intentar? - alzo un poco mi voz.

-No, de eso nada tu padre se encargará – bufo cuando la escucho.

-No entiendo porque papa tiene que hacer todo el trabajo – mi madre está cada vez más nerviosa, se lo noto.

-Tu padre sabe lo que hace Sofía deja esto en nuestras manos – la miro cuando ella me mira no entiendo nada, sé que hay algo aquí que no cuadra y que ella está intentando ocultármelo, pero los secretos no siempre se pueden guardar para siempre.

Al fin y al cabo, salen a la luz por más que tú lo intentes ocultar y esconder.

-Soy vuestra hija todo lo que os pase me influye también a mi – lo vuelvo a intentar para que mi madre me cuente de una vez.

-Lo se mi amor, pero sabes que todo lo que hacemos tu padre y yo es por tu bien – cuando la voy a contestar la puerta se abre.

El medico entra por la puerta con una sonrisa y su libreta grande en mano.

-¿Se acabo ya la visita? - le pregunto porque en algunos hospitales te dan un tiempo.

-No, solo vengo a decir que la vamos a dar el alta – mira a mi madre.

-¿Tan pronto? - le pregunto.

-Esta todo bien en las pruebas sale todo correcto podrá seguir recuperándose en casa – miro a mi madre que le asiente con la cabeza al médico.

El medico sale de nuevo del cuarto dejándonos solas, pero sinceramente no voy a llegar a nada con mi madre por más que siga intentando sacarla las cosas, es como mi padre cuando es sobre cosas así se cierran.